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Proyecto de "ley para la defensa de la democracia"

La creación de una unidad especial de policía judicial, especializada en la lucha antiterrorista, así como, disposiciones relativas a la prolongación de las detenciones preventivas, autorización de escuchas telefónicas y posibilidad de apertura de correspondencia, constituyen algunas de las medidas incluidas en el borrador elaborado por el Ministerio del Interior como proyecto de ley especial contra el terrorismo, y que desde la reunión de la Moncloa del pasado fin de semana ha tomado el nombre de «ley de Defensa de la Democracia contra el Terrorismo».El atentado de Guernica del pasado sábado, ocurrido cuando estaban reunidos el señor Suárez y los representantes de los grupos parlamentarios, provocó un acuerdo de todos los presentes sobre la necesidad de promulgar una ley con dicha finalidad. En el borrador elaborado por el Ministerio del Interior -y que será estudiado en la nueva reunión de la Moncloa, que tendrá lugar mañana- se contemplan medidas como las siguientes:

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Portavoces del Senado, recibidos por Suárez

-Nueva definición de los hechos que deben ser considerados como actos de terrorismo, y de las organizaciones que deben quedar comprendidas en la materia de esta ley.

-Creación de una unidad especial de policía judicial, para llevar a cabo la lucha contra el terrorismo

-Previsiones sobre circunstancias en que pueden prolongarse las detenciones policiales, y sobre aquéllas en que pueda prescindirse del madamiento judicial para el registro de domicilios y locales; así como posibilidad de incomunicar a los detenidos por estas actividades.

Escuchas telefónicas

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Otras medidas consisten en la autorización judicial para escuchas telefónicas -en determinados casos-, así como apertura de correspondencia; posibilidad de proceder al secuestro de publicaciones que proporcionen noticias relacionadas con la investigación de actos terroristas; y recompensas a personas que, estando implicadas en actividades relacionadas con la materia contemplada por esta ley, colaboren a la identificación y descubrimiento de mienbros de organizaciones terroristas.El dossier enviado por la Presidencia del Gobierno a los grupos políticos con representación parlamentaria justifica la aley con el argumento de que el orden democrático debe ser defendido frente al terrorismo organizado tanto de la derecha autoritaria como de la izquierda revolucionaria, y dado que, sin el desarme del terrorismo, podría peligrar la consolidación de la democracia.

Llama la atención la amplitud de medios represivos que podrían utilizarse en esta lucha antiterrorista, aunque no ha podido conocerse el articulado concreto de la ley -que, al parecer, aún no ha sido finalizado-, y por tanto no se explican las circunstancias exactas en que serían utilizados

El nombre dado a la ley recuerda el de «Defensa de la República» que tomó la disposición aprobada por las Cortes republicanas de 1931, en la cual se preveían multas, confinamiento o extrañamiento para los autores de actos de agresión a la República, y no contenía disposiciones especiales sobre recorte de otros derechos constitucionales o incremento de las facultades policiales.

El Gobierno prevé, igualmente diferentes, reformas en la organización de las fuerzas de orden público. Se trata de elaborar una ley de policía nacional, de forma que ésta quede integrada por un cuerpo general de policía, de carácter civil; un cuerpo, de la policía armada y guardia civil,de carácter militar; y unidades especiales de policía judicial. El mando de todas estas fuerzas será civil.

También se prevé una reforma de la ley de orden público, que incluiría,upa nueva definición del orden público -en el sentido de que se trata del libre y pacífico disfrute de las libertades públicas-; y regulación de situaciones de emergencia (paralización de servicios públicos, catástrofes naturales...).

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