Los problemas económicos ocuparon el primer día de la "cumbre"

A lo largo del día de ayer, los representantes de los grupos parlamentarios permanecieron reunidos con el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez; los vicepresidentes segundo y tercero; Enrique Fuentes y Fernando Abril; el ministro de Hacienda, Francisco Fernández Ordóñez y el ministro de Industria y Energía, Alberto Oliart. La reunión no se interrumpió para el almuerzo, puesto que los participantes en la cumbre almorzaron en el mismo palacio de la Moncloa.

Muy pocos datos concretos pudieron filtrarse ayer sobre el desarrollo de la sesión. Se sabe que los problemas económicos constituyeron el tema más importante, y el primero de los abordados por los asistentes en la cumbre. Sin embargo, al producirse la noticia del asesinato del presidente de la Diputación de Vizcaya y sus acompañantes, quedó interrumpido el debate económico para proceder a la redacción de un comunicado de repulsa en torno a los hechos, cuyo texto ofrecemos en las páginas dedicadas al atentado.Minutos después de las dos de la tarde los señores Ajuriaguerra y Sodupe, miembrosde la minoría vasco-catalana, abandonaron el palacio de la Moncloa para marchar rápidamente al País Vasco, a la vista de la gravedad de los acontecimientos ocurridos en Guernica. Los dos representantes vascos declararon que abandonaban la sesión con pesar, pero que consideraban deber urgente y prioritario marchar a Bilbao. No firmaron el comunicado de los asistentes a la cumbre de la Moncloa porque aún no había sido redactado, pero expresaron su conformidad con los planteamientos escuchados.

Hacia las 17.15, Jordi Pujol y Enrique Tierno salieron unos momentos al jardin de la Moncloa, aprovechando un pequeño descanso, y fueron abordados por los periodistas que montan guardia frente al palacio. «Todavía estamos tratando el tema económico», comentaron.

La primera persona en abandonar el palacio, terminada la reunión, después de las siete y cuarto de la tarde, fue Federico Silva, de Alianza Popular, quien se negó a efectuar declaraciones o expresar su opinión. Manuel Fraga, del mismo partido, que le siguió, tampoco efectuó declaraciones, mientras que Enrique Tierno Galván, del Partido Socialista Popular, se mostraba optimista, aunque estimaba que sería en la sesión de hoy donde podrían producirse «diferenciaciones». La impresión más optimista fue la formulada por Santiago Carrillo, del Partido Comunista de España, quien, calificó la reunión de «histórica y positiva». Interrogado sobre si estaba más cerca su propugnado Gobierno de concentración, dijo: «En todo caso, estamos más cerca de. un acuerdo en defensa de la consolidación de la, democracia. ». El profesor Fuentes Quintana, sonriente, se limitó a considerar «favorable» la respuesta de los partidos. Felipe González, del Partido Socialista Obrero Español, empleó. el mismo término: «Ha sido una reunión positiva», para añadir que la preocupación que había expresado días pasados había quedado resuelta ayer, en el sentido de que se había entrado a tratar los problemas del país seriamente. Ernest Lluch, de Socialistas de Cataluña, dijo «La reunión ha sido todo menos aburrida.»

Abril Martorell, portavoz de la reunión y del Gobierno, estimó que la reunión se había desarrollado en un clima de «cordialidad, serenidad y reflexión». Hoy, añadió, se tratarán aspectos políticos, Y no se descarta que el Gobierno establezca en días sucesivos nuevos, contactos con los partidos, Párlementarios, de forma globál o parcialmente. Señaló también que el programa económico gúbernamental no podrá ser discutido en el Congreso posiblemente antes del día 17 o 19, puesto que antes habrá de tratarse el Reglamento de, la Cámara y el tema de la amnistía.