Coplaco podría suspender el Plan de Ordenación

El Plan General de Ordenación Urbana de Getafe podría quedar definitivamente suspendido a la espera de que la nueva corporación que resulte de las elecciones municipales elabore uno nuevo que cuente con el apoyo de los vecinos. Esta es la conclusión que se desprende de las conversaciones entre el delegado de Gobierno en el Área Metropolitana, Elias Cruz, y el organismo unitario que engloba a partidos políticos, centrales sindicales y movimiento ciudadano de Getafe, redactores de una serie de alegaciones que se oponen rotundamente al plan.

En la última reunión mantenida el pasado viernes, el señor Cruz prometió que en el próximo pleno de Coplaco, a celebrar a fines de octubre, presentaría una moción pidiendo la anulación de todas las actuaciones municipales de redacción y aprobación provisional del plan.Según expusieron representantes del organismo unitario en rueda de prensa, el señor Cruz mantuvo la idea de que un plan de estas características debla ser aprobado por una corporación más representativa que la actual, y ofreció, además, el que un miembro de dicho organismo asistiera como invitado a la reunión del pleno. La oferta fue aceptada.

Se da la circunstancia que al pleno asistirá también el alcalde de Getafe, Angel Arroyo, como representante de los Ayuntamientos de la provincia en Coplaco.

Amplia colaboración

Los miembros del organismo unitario hicieron ayer hincapié en que el hecho de estar unidos ha pesado decisivamente en el ánimo del Ministerio de la Vivienda. Es la primera vez que se consigue una colaboración tan amplia entre las diversas organizaciones políticas y ciudadanas en un tema vecinal.El sábado y el domingo se pusieron mesas de propaganda por el pueblo, se repartieron 30.000 octavillas, 3.000 informes con las alegaciones, 2.500 carteles y 10.000 pegatinas, al tiempo que se hacía una encuesta, encaminada de paso a difundir el problema entre la población.

Las alegaciones ya son conocidas por el delegado del Gobiemo en Cioplaco, aunque aún no las haya recibido oficialmente. Las más importantes hacen referencia a los siguientes puntos:

- El plan, por deseo expreso del Ayuntamiento, contempla sólo los terrenos de nueva programacion, sin incluir para nada el casco urbano ya existente. Esto quiere decir que los actuales problemas urbanísticos sanitarios, escolares, de guarderías, etcétera, no son abordados por el plan, y seguirán como están.

- El plan estima que para 1990 Getafe tendrá una población de 220.000 habitantes, tomando cómo base de crecimiento un índice acumulable del 6%, y como fecha de partida la de 1970. Las alegaciones lo refutan en el sentido de que el índice real es del 11 % y que la cifra que el Ayuntamiento estima para 1980, de 125.000 habitantes, es lo que cuenta el pueblo actualmente. La aprobación del plan supondría que en 1990 la población llegaría a las 275.000 personas, 55.000 más que las previstas.

- El Ayuntamiento propone como sistema urbanístico el de compensación, seguido en años anteriores, y que en opinión de los alegantes se ha revelado como ineficaz y causante del déficit actual de escuelas, parques y solares que padece Getafe. Se propone el sistema de cooperación, por el que el Ayuntamiento urbanizaría directamente los terrenos, pasando luego la factura a las constructoras, evitando así los incumplimientos de obligaciones por parte de aquéllas.

- Las alegaciones denuncian las primeras jugadas especulativas originadas por el plan y citan a la empresa Ursoto, constituida en junio de 1975 -cuando aún no había salido siquiera a información pública- cuyo presidente es Eduardo Fierro Guerra y propietaria de terrenos en la zona de Perales del Río, que el plan prevé convertir en edificable.

- El plan no señala claramente el techo del número de viviendas por hectárea neta, aparte que exigiría una aportación municipal de unos 1.300 millones de pesetas, lo que se considera abusivo teniendo en cuenta la situación de abandono del actual caso urbano. La cantidad citada supondría comparativamente el 18% de los presupuestos municipales de los próximos veinte años.