"Puede negociarse sobre Gibraltar respetando a los gibraltareños"
Puede negociarse sobre Gibraltar respetando los intereses de los gibraltareños. La política exterior debe hacerse en las Cortes. España no es una gran potencia, pero cuenta con las virtualidades necesarias para representar un papel de potencia internacional de tipo medio o de potencia regional de primer orden. Estas son algunas de las afirmaciones del ministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, en su intervención ante el Pleno del Congreso.
Se refirió el ministro a las relaciones de buena vecindad que deben inspirar nuestra política hacia Portugal, Europa y los países mogrebíes, así como a la necesidad de concretar la normalización de nuestras relaciones diplomáticas con aquellos países donde aún no están establecidas.Respecto a Gibraltar anunció que el problema puede entrar en cauces de negociación, a base de que sea reintegrado el Peñón a la soberanía española, respetando los intereses de la población gibraltareña.
«Una España democrática -prosiguió- estará en mejor situación que nunca para hacer frente serenamente a los que hacen de la presión norma habitual en las relaciones entre los Estados. Aunque no quiero entrar aquí en el examen del tema de Canarias, ten,o que afirmar que Canarias es parte integrante de nuestro territorio y no es negociable. El Gobierno no consentirá ninguna comisión de encuesta que pretenda asomarse a un trozo de tierra española.»
En cuanto al problema del Sahara el ministro mencionó la necesidad de buscar fórmulas realistas, e hizo hincapié en el hecho de que los acuerdos de Madrid habían sido una consecuencia de la petición hecha por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para que las partes interesadas abrieran negociaciones en torno a dicho territorio.
Asimismo examinó el problema de la OTAN y anunció que podrá ser debatido en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso. Unicamente resaltó que los riesgos nucleares que se derivan para España del Tratado con Estados Unidos han quedado reducidos, al quedar prohibido al almacenamiento de armas nucleares en nuestro país, así como por existir una fecha ya fijada para la retirada de los submarinos nucleares de nuestras aguas.
Dijo también que frente a la inflación retórica, el Gobierno ofrece hoy resultados y objetivos alcanzados en los últimos meses. Después señaló que España debe aspirar a jugar en las relaciones internacionales un papel de pacificación y concordia, conjugado con la defensa de nuestros intereses y la independencia e integridad territorial. Finalmente, afirmó que la política exterior debe contar con el más amplio consenso posible de lás fuerzas políticas del país y ser la proyección natural de la política interior de una sociedad estable.
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