PNV y PSOE rivalizan por protagonizar la autonomía de Euskadi

Como decisiva calificó un portavoz del PNV la reunión que anoche habla convocado el partido para ultimar su proyecto de estatuto de autonomía, que será hecho público muy posiblemente en el transcurso de los próximos días, después de presentarlo al Gobierno Vasco y a la Asamblea de Parlamentarios.

Los trabajos que en este terreno desarrollan los nacionalistas van encaminados en dos direcciones: elaborar un estatuto de autonomía con toda su articulación legal y estudiar el entramado administrativo del que dependen hoy las cuatro provincias vascas. Este segundo estudio, carente de toda posible utilización propagandística, resultará de gran utilidad a la hora de proceder al trasvase de competencias del poder central al poder autonómico.Una vez más el PNV insiste en que el régimen transitorio que pueda establecerse hasta la aprobación del estatuto no le preocupa en exceso. Uno de sus más cualificados dirigentes se expresaba así: « La autonomía está a la vuelta de un año, o sea, que no es tan decisivo un régimen transitorio cuando hemos estado cuarenta años sin nada. »

En las filas nacionalistas ha causado, sin embargo, una cierta amargura el hecho de que el PSOE se les haya adelantado en el tema de la autonomía al presentar su borrador de régimen transitorio. Incluso han acusado a los socialistas de afán de protagonismo por haber hecho público su proyecto antes de presentarlo a la Asamblea de Parlamentarios de Euskadi.

Los socialistas responden diciendo que su única finalidad era la de dinamizar el proceso autonómico dentro de la Asamblea ya que se estaba demorando en exceso. Al contar con un proyecto concreto confían en que las negociaciones puedan acelerarse.

Los nacionalistas insisten en que el proyecto de régimen transitorio es una cuestión de orden menor y que lo que les interesa por encima de todo es que los socialistas den a conocer sus intenciones autonomistas mediante un borrador de estatuto debidamente elaborado. «Si tanta es la urgencia para redactar el estatuto -añaden-, lo lógico esque hubieran asistido a las reuniones celebradas por la comisión parlamentaria.»

Todo ello significa, en términos más claros, que se han roto las hostilidades entre los partidos vascos en torno a la cuestión autonómica. Las estrechas relaciones que PNV y PSOE mantenían en la etapa preelectoral parecen haberse enfriado para dejar paso a una sorda lucha de declaraciones públicas.

El proyecto presentado por el PSOE tiene, sin embargo, una articulación coherente,que lo hace válido, incluso a los ojos de algunos diputados del PNV, para iniciar los debates en el seno de la asamblea parlamentaria. La objeción más de fondo que opone el nacionalista Arzallus se refiere, una vez más, al planteamiento que hacen los socialistas de la cuestión de Navarra, a la que incluyen en Euskadi, pero al propio tiempo parecen marginarla,en una primera etapa. En términos similares se pronuncia en torno al proyecto del PSOE el diputado de Euskadiko Ezkerra, Francisco Letamendía.

Esta objeción viene del propósito socialista de potenciar el protagonismo del Gobierno Vasco en la negociación autonómica, siendo así que dicho Gobierno no representa a Navarra. Extraña, por otra parte, el súbito interés demostrado por los políticos vascos en potenciar un Gobierno que hasta hace tan sólo unas semanas era considerado por todos como un mero símbolo, sin capacidad operativa alguna. Las repetidas visitas a la delegación de Bayona no parece que sean, sin embargo, otra cosa que escaramuzas de partido, porque la cuestión de la autonomía está claro que se la reservan los parlamentarios y el tema de Navarra imposibilita además al Gobierno Vasco para desempeñar un papel de protagonista como el que puedajugar Tarradellas en Cataluña.

Este espinoso asunto de Navarra debe ser, sin embargo, resuelto por los propios parlamentarios navarros y con este fin, el PSOE, que tiene dos diputados en esta circunscripción, se dispone nuevamente a tomar la cabeza y para ello va a entablar negociaciones directas con los representantes de UCD, contrarios a integrarse en Euskadi . El primer contacto formal entre ambos partidos estaba convocado para eljueves pasado, pero compromisos parlamentarios han obligado a retrasarlo hasta el próximo miércoles.