Javier de Ybarra a escrito a su familia
Una carta escrita a mano en la que Javier de Ybarra explica que se encuentra bien de salud y muy fortalecido espiritualmente llegó a mediodía de ayer a la residencia Bidarte, de Neguri, donde se hallaban reunidos los hijos del industrial vizcaíno secuestrado el pasado día 20 por un comando de ETA político-militar.
La carta, fechada el pasado sábado, 28 de mayo, y matasellada en Bilbao, fue recibida por correo normal por Mercedes Marrena (a quien iba dirigida), empleada del Tribunal Tutelar de Menores de Vizcaya -del que Javier de Ybarra es presidente-, y hecha llegar inmediatamente a la familia Ybarra, cuyo portavoz. Juan Antonio de Ybarra, reunió a primera hora de la tarde a un reducido grupo de periodistas para darles cuenta de la misma.El hijo mayor de los Ybarra no quiso mostrar a los periodistas el original de la carta, escrita a mano por el secuestrado, limitándose a facilitar una copia escrita a máquina, por lo que sólo consta su palabra de honor, como él mismo dijo a los periodistas presentes en la residencia de los Ybarra en Neguri. «La letra es normal», declaró Juan Antonio de Ybarra. Con la carta, Javier de Ybarra hizo llegar a sus hijos una llave («acompaño a estas líneas una llave que os es indispensable para cuanto a la capilla se refiere», escribe en una postdata el secuestrado, que corresponde a un armario de la finca donde a su vez se encuentra otra llave que abre el sagrario de la capilla particular.
«A buen seguro nuestro padre estaba preocupado porque no pudiésemos utilizar el sagrario de la capilla familiar», manifestó a EL PAIS Juan Antonio de Ybarra. El texto de la carta, que va dirigido a sus hijos (Javier de Ybarra es viudo), es el siguiente: «Queridos hijos: Por fin mis secuestradores me permiten escribiros después de que han transcurrido siete días desde que escuché vuestro mensaje por la radio.
Me encuentro bien de salud y muy fortalecido espiritualmente, ya que en la adversidad me siento más unido a Dios. Le doy gracias por ello y acepto plenamente cuanto pueda disponer respecto a mí.
Os tengo muy presentes, así como a cada uno de los miembros de nuestra querida familia y a los amigos. Y pienso en los asuntos que me incumben.. especialmente en los que viven momentos delicados y sin olvidar a los muy entrañables de tutela y reeducación de menores.Con todo cariño os abraza vuestro padre.
Javier.»
La carta, al igual que el comunicado del pasado día 22 de mayo en el que ETA político-Militar se atribuía el secuestro de Javier de Ybarra, no alude a ninguna reivindicación política o económica de la organización vasca ni a las condiciones de un posible rescate, limitándose a hacer una prueba de que el pasado sábado el industrial vizcaíno se encontraba con vida y posiblemente en algún punto de Vizcaya. Por lo que continúa sin romperse la rigurosa ley del silencio a la que tanto la familia Ybarra como ETA político-militar parecen comprometidos.
La carta -es preciso insistir en que los periodistas no vieron el original manuscrito, sino sólo una copia- no arroja, por tanto, ningún nuevo dato sobre el secuestro cuando hoy se cumplen doce días del mismo. Juan Antonio de Ybarra, que manifestó que la familia se encuentra angustiada, no quiso responder a ninguna pregunta de los informadores, limitándose a contestar a todas las preguntas (incluida la de un posible rescate económico) que «todo está en manos de Dios y que la familia se encomendaba a EL».
Al parecer, dos jesuitas de la Universidad de Deusto se han sumado a las personas que están manteniendo contactos con gente próxima a la organización ETA político-militar con el fin de resolver el secuestro. Las operaciones policiales, que continuaron durante todo el día de ayer, siguen sin dar ningún resultado positivo.
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