"La democratización de la RTVE exige tolerancia del público"

El director general de la BBC, Charles Curran, ha estado estos dos últimos días en Madrid, invitado por la Cámara Superior de Comercio a participar en el ciclo de conferencias que esta entidad está organizando sobre las distintas instituciones que asientan el pluralismo formal de la democracia.El señor Curran, conocedor de la situación política y social que atraviesa España a través de los frecuentes viajes que realiza a nuestro país, pronunció ayer una conferencia sobre el tema: « Información y democracia». Al término de la misma respondió a las preguntas de EL PAIS.

-¿Cuál es en su opinión el papel que los medios de comunicación social -y en concreto la radio y la televisión- deben desempeñar en las futuras elecciones para que éstas se desarrollen democráticamente?

-La primera función que debe desempeñar la radio y la televisión en estos momentos es identificar a las personas que representan las distintas opciones políticas y aclarar el contenido de estas opciones por medio de entrevistas directas, discusiones entre partidos y reportajes sobre las distintas campanas electorales.

El problema es que no se puede educar al público en dos semanas ni en dos meses y, aunque las cosas están cam6iando -yo mismo he sido entrevistado en RTVE con entera libertad y he escuchado en Radio Nacional al señor Montero explicar la política de su partido después de la legalización del PCE-, todavía subsiste en estos medios la actitud mental del franquismo.

La experiencia de dos décadas ha condicionado las reacciones del público de forma no precisamente democrática. Por eso, la primera condición para conseguir una radio y una televisión democráticas es una actitud tolerante por parte del público.

-¿Qué opinión le merece la evolución que ha experimentado en los últimos tiempos la prensa española?

-Aunque el peligro de una sanción o un secuestro ha pendido constantemente sobre los directores de las publicaciones, pienso que en el aspecto práctico, la libertad de expresión en la prensa española no ha hecho más que aumentar en estos dos años. Junto a los viejos pilares de rectitud -ABC Ya, Vanguardia...- hemos visto ampliar sus fronteras a Informaciones y al nuevo diario EL PAIS multiplicar sus posibilidades de forma notable en su año de existencia. Por otra parte, la resolución del caso Madrid, demostración de la integridad de los jueces españoles ante esta nueva era, la prometedora evolución editorial en la prensa de provincias y la supresión del artículo 2.º de la ley de Prensa llevan a la conclusión de que es poco lo que el público lector de fuera puede enseñar al lector español.

-¿Qué cambios exige la democratización de las estructuras de la radio y de televisión españolas?

-Es el público quien debe dar libertad a la radio y a la televisión. Más que una cuestión de mecanismos es cuestión de una actitud de tolerancia. En este sentido, la libre expresión es más fácil en la prensa porque la radio y la televisión exigen mayor dosis de tolerancia al ofrecer una gama de elección más limitada.

Además, por parte de los profesionales de la información y, sobre todo, de los directores de los medios, es necesaria una actuación responsable y un criterio independiente para responder a las expectativas del público y dar credibilidad a la información.

En resumen, una radio y una televisión democráticas y libres; sólo serán posibles si el público está dispuesto a admitir la diversidad de opiniones y a abandonar la actitud conformista en la que se desarrolló el sistema franquista.