_
_
_
_
_

Termina la huelga de Induyco

Los 850 últimos huelguistas de Induyco decidieron ayer, durante el transcurso de una asamblea celebrada en una iglesia de Moratalaz, aceptar la propuesta de la empresa y terminar así una huelga que ha durado más de un mes. La reincorporación al trabajo, prevista para hoy, se efectuará después de que cada trabajador firme la carta enviada por la empresa en la que se compromete a someterse a la disciplina laboral. A cambio, no se producirán sanciones ni represalias contra los afectados en el conflicto.

La propuesta de la empresa consiste en no aplicar sanciones y negociar las reivindicaciones referentes al comedor y a la crea de comisiones mixtas de tra bajadores y empresarios que vigilen por la no indiscriminación en las categorías profesionales y el desarrollo normal de la producción. Sin embargo, la empresa no ha aceptado ni readmitir a los cuatro despedidos que originaron el conflicto, ni considerar la dimisión de la junta sindical, otro de los puntos planteados por los huelguistas. Además se reserva el derecho de efectuar trasladados de personal, aunque dentro de la provincia de Madrid.En el balance de la huelga se recuentan unas cien detenciones, multas gubernativas, la pérdida del salario de más de treinta días y los heridos producidos durante los enfrentamientos, tanto entre huelguistas y fuerza pública, como entre trabajadores y elementos incontrolados.

Pese a ello, trabajadores de Induyco afiliados a Comisiones Obreras consideran que el resultado de la huelga, no es desalentador. Aunque no se hayan conseguido las reivindicaciones iniciales, es importante el hecho de que el conflicto haya terminado sin sancionados, pese a que el contenido de la huelga ha sido de marcado carácter político. Sin embargo, otras trabajadoras consideran que la lucha ha sido un fracaso, según manifestaron durante una rueda de prensa celebrada ayer en Madrid. Estas mismas empleadas añadieron también que parte de este fracaso es debido a la actuación de las centrales sindicales, que, en su opinión, no han actuado con toda la fuerza de presión que merecía el conflicto de Induyco. Los representantes de CCOO respondieron que su central, tras analizar la huelga, llegó a la conclusión de que la mejor manera de presionar sobre la empresa era haciendo una campaña contra las ventas de El Corte Inglés (principal cliente de Induyco), para cuyo fin se imprimieron y repartieron 50.000 carteles.

Respecto ala jornada de lucha convocada por la COS en solidaridad con los huelguistas, éstos manifestaron que la convocatoria «se hizo tarde y mal», mientras que los representantes en la rueda de prensa de Comisiones afirmaron que, «en Madrid, resulta extremadamente difícil sacar adelante una jornada de lucha cuando no se trata de defender reivindicaciones económicas propias de cada fábrica o sector o, en todo caso, en protesta por los asesinatos o las medidas económicas».

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_