Soares, optimista acerca del ingreso de España en la CEE

Mario Soares, primer ministro portugués, dijo ayer en Londres que si la CEE no apoyaba el ingreso de su país en la Europa comunitaria, Portugal se convertiría en la Cuba de Europa. Soares, que presentará la candidatura de Portugal el próximo mes de marzo, al final de su actual gira por Europa, mostró gran optimismo sobre las posibilidades de que el Gobierno español pueda hacer lo mismo que nosotros en un futuro inmediato.

El primer ministro británico, James Callaghan, se ha mostrado esperanzado, como el jefe del Gobierno portugués, acerca de la democracia española del futuro. Por supuesto que hemos hablado de España con Callaghan, dijo ayer a EL PAIS el doctor Soares, y la seguiremos haciendo a lo largo de nuestra visita a los países de la CEE, porque estimamos que el restablecimiento de un régimen democrático y estable en España es vital para nuestro propio país.

En las mismas declaraciones a EL PAIS, Mario Soares indicó que la labor de mi homónimo español, el presidente Suárez, ha sido de una gran importancia para salvar las dificultades que se le han presentado al Gobierno de la Monarquía.

En una rueda de prensa que mantuvo con periodistas de todo el mundo al final de su visita a Londres, Soares habló también de las posibilidades de la entrada de España en el Mercado Común: «Esta tendrá todo el derecho a formar parte de la CEE en cuanto sea una completa democracia. Nuestra posición es extremadamente favorable a esa integración. Sabemos que en un futuro próximo, España estará en condiciones de hacer exactamente lo que nosotros estamos haciendo estos días. Creo que el Gobierno español está en el camino de la creación de instituciones democráticas estables, como las que nosotros tenemos ya funcionando en Portugal. Si eso no fuera así y España no consigue un estatuto -democrático, la influencia de ese hecho sobre Portugal será muy negativa. La Europa comunitaria no puede subsistir sin la Europa del Sur, que sería una presa fácil, por otro lado, de la amenaza comunista. En Portugal se padeció esa amenaza después de la revolución y puede aparecer de nuevo. Lo mismo se puede decir de España.

En Londres, Mario Soares le presentó al Gobierno británico el dossier de las ventajas económicas que la integración portuguesa le reportaría a la Comunidad, porque, en el aspecto político, el primer ministro, Callaghan, participa de los temores del jefe del Gobierno portugués.

Los mismos argumentos le fueron presentados anoche por Sciares a sus colegas del Gobierno irlandés, en Dublín.