Problemas económicos en los pueblos cercanos a Guadalajara
El destino de los pueblos visitados ayer por el presidente de la Diputación Provincial, cercanos todos ellos a la provincia de Guadalajara, no parece ser otro que convertirse en la residencia de fin de semana de los madrileños. A ello ayudan la escasa industrialización de la zona, la quiebra de la agricultura, hasta ahora su medio de vida, y la total falta de autonomía económica de sus municipios para cubrir sus necesidades básicas.
En casi todos ellos se dio hace años un trasvase de la agricultura a la construcción, principalmente, y a las fábricas de los cinturones industriales de Alcalá de Henares, San Fernando y Torrejón. Con la actual crisis de la construcción, el número de parados es muy alarmante. Una vecina de Ambite contaba que en el pueblo sólo quedan los viejos, que viven de sus pensiones, y que los jóvenes aguantan como mucho hasta que se casan, y fijan luego su residencia más cerca de su lugar de trabajo.Al mismo tiempo, comienzan a aparecer urbanizaciones de chalets, algunas de ellas tan importantes como las de Eurovillas, más de mil viviendas, favorecidas, además, por la belleza del paisaje y de los mismos pueblos. Nuevo Baztán, por ejemplo, fue proyectado por Churriguera, a mediados del siglo XVII, y de esa época data su primer sistema de alcantarillado. En Pozuelo del Rey subsiste una iglesia del siglo XVI, y la fachada de otra aún más antigua. Olmeda de las Fuentes ha sido elegido lugar de residencia por varios pintores de la escuela de Vallecas, de Madrid, y varias de sus obras, se exponen en la parroquia.
Pero el paisaje y el exterior de los edificios no justifican las incomodidades de su población. La mayoría de las casas tienen humedades, las calles se convierten en barrizales con las lluvias, la vida social es mínima y las villas languidecen. Los más cercanos a Madrid, corno Mejorada del Campo, han iniciado un fuerte desarrollo. El Ayuntamiento espera que la población aumente en 40.000 habitantes en los próximos cinco años. Hay ya 10.000 licencias de construcción solicitadas. Hoy, el pueblo aún no cuenta con un consultorio -sólo hay dos médicos- y las obras a realizar son de pavimentación, red de distribución de agua y alumbrado público.
Loeches no ha podido programar obra alguna para el bienio 1976-77 por la sencilla razón de que ya están endeudados al máximo con las que se proyectaron el anterior. Esperan estar más desahogados para el plan siguiente. Pozuelo del Rey tiene presentada una reclamación de la empresa que ejecuta las obras por falta de pago municipal, a pesar de que de los siete millones que les correspondían, la diputación les concedió cuatro como subvención a fondo perdido. Tampoco han podido proyectar nada para el bienio actual.
Ambite ha tenido que sacar a subasta pública 52 hectáreas del término municipal, a un precio mínimo de dieciocho millones para poder hacer frente a su aportación y Campo Real, aunque tiene obras aprobadas por diecisiete millones de pesetas, no podrá realizarlas mientras el Ayuntamiento no consiga fondos. Su alcalde manifestó que, a pesar de disponer de un presupuesto anual de cinco millones y medio de pesetas. están a cero.
En cambio, Nuevo Baztán, con unos trescientos habitantes perennes -y unos 4.000de fin de semana y vacaciones-, goza de un presupuesto de nueve millones de pesetas, el mismo que Mejorada del Campo, que cuenta con más de 5.000 residentes fijos. No se en tiende muy bien esta diferencia en las cantidades asignadas por Ha cienda a pueblos de muy parecidas características.
Aparte de las necesidades de infraestructura descrita, ni las corporaciones ni los mismos vecinos manifestaron tener demasiadas más. Sólo mayor asistencia médica e instalaciones deportivas. Ni siquiera Mejorada del Campo cuenta con un consultorio, y el resto de los pueblos «se apañan » -según su propia expresión- con un médico, acompañado a veces de un practicante.
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