La alerta antiterrorista se mantiene en Londres

Sigue la alerta contra el terrorismo en la capital británica. La policía inglesa se ha mantenido en estado de alerta durante las últimas 48 horas porque no ha desaparecido la amenaza de intensificación de la ola terrorista, que se inició en la madrugada del pasado sábado. Ayer estuvo cerrada durante algún tiempo la zona de Oxford Street, donde se produjeron las principales explosiones del fin de semana. Una falsa alarma hizo que la brigada antiterrorista de Scotland Yard vigilara aún más cuidadosamente esta área principal de la capital británica.

La policía está convencida ahora de que los atentados del sábado fueron preparados por un nuevo grupo activista del IRA provisional, que ha sido formado en territorio británico y que aún no ha abandonado el país. Sus miembros pudieron llegar a Inglaterra desde alguna capital extranjera, para evitar los registros que se suelen hacer entre las personas que provienen de Irlanda o del Ulster.

Las sospechas sobre la participación del IRA en esta nueva campaña quedaron reforzadas en la madrugada del domingo, cuando artefactos parecidos a los que fueron colocados en Oxford Street comenzaron a hacer explosión en otras localidades del Ulster.

En las últimas semanas, el ministro para Asuntos de Irlanda del Norte, Roy Mason, ha repetido que Gran Bretaña no se retirará de ese territorio ni tratará de hallar fórmulas de solución política del conflicto mientras no restaure la paz en la provincia.

Las bombas de las últimas 72 horas parecen haber sido una respuesta a Mason. De todos modos, según informaciones aparecidas en Londres, no todos los líderes del IRA aprueban el uso de la violencia en ciudades británicas, porque eso eliminaría las posibles simpatías con que la organización cuenta en este país. La manifestación que los partidarios de una retirada militar británica del Ulster celebraron el domingo en Londres, contó con poco más de ochocientos participantes.