Enfrentamientos entre grupos de manifestantes y fuerzas del orden

Los únicos incidentes reseñables, registrados ayer en Madrid fueron los producidos en las proximidades de Manuel Becerra, donde se produjeron enfrentamientos entre manifestaciones y la fuerza pública. No se tienen noticias de qué se hayan producido heridos de importancia, pese a que los choques fueron en algunos momentos tan violentos que obligaron a retroceder a la policía. Esta impresión fue recogida en fuentes fidedignas.

Por la mañana, la normalidad fue total en Madrid, a nivel de manifestaciones. Hubo concentraciones pacíficas ante la salida del cadáver de Luis Javier Benavides, uno de los abogados asesinados el lunes en el despacho de Atocha, del Instituto Anatómico Forense, también se produjeron demostraciones pacíficas de repulsa por el atentado en la zona de Villaverde. Aunque la vigilancia era grande, en ninguno de estos dos casos llegó a intervenir la policía.Un helicóptero sobrevoló durante toda la mañana puntos neurálgicos de la capital de España y las zonas industriales donde se habían producido huelgas de solidaridad. Las fuerzas de la policía estaban reforzadas en dichos puntos por brigadas antidistutbios procedentes de otras provincias. En algunos casos, se produjeron rigurosos controles en determinadas zonas madrileñas, donde la presencia policial era muy grande.

El grado de tensión observado ayer en Madrid subió a medida que se aproximaba la hora fijada para el entierro de las personas asesinadas el pasado lunes en el despacho laboralista de Atocha. Las manifestaciones producidas en la tarde de ayer estuvieron protagonizadas por grupos que habían participado en la concentración del Colegio de Abogados, donde se había instalado la capilla ardiente de los letrados muertos y de donde partió la comitiva hacia los cementerios.

La parte más numerosa de esos grupos se dirigió desde la plaza de Cibeles hasta la de Roma. Allí, los manifestantes, algunos de los cuales portaban banderas republicanas, fueron disueltos por la policía, que utilizó fuerzas a caballo y gran cantidad de botes de humo. Aunque la fuerza pública se empleó con violencia, en ninguno de los centros asistenciales próximos a la zona consultados por EL PAIS se detectó la presencia de heridos.

El resto de los incidentes ocurridos en otras zonas de Madrid son de menor importancia. En algunos barrios como Cuatro Caminos, Vallecas, El Pilar, algunos jóvenes intentaron el cierre de establecimientos comerciales. En la plaza Elíptica, sobre las seis y media de la tarde, un grupo compuesto por unas cien personas apedreó un jeep de la Policía Armada. En Atocha se produjeron también conatos de manifestación. En la Plaza Mayor, la policía arrancó los carteles a un grupo de manifestantes no violentos, como se autodenominan, que ya anteayer habían aparecido en el mismo lugar, protestando por los sucesos de los últimos días.