La prensa lisboeta especula abiertamente sobre un cambio de Gobierno
«No he pensado en la posibilidad de sustituir el Gabinete de Mario Soares por un Gobierno de civiles y militares presidido por el ministro del Interior», dijo ayer el presidente de Portugal, Ramalho Eanes, al ser preguntado por los periodistas sobre los rumores en ese sentido. El diario conservador El Día había lanzado la noticia de que militares meloantunistas presionaban al presidente de la República para que encargase al teniente coronel Costa Bras de formar Gobierno.0 Seculo, considerado como portavoz del PSD, es más tajante, titulando a toda página: «Eanes no desmiente cambios en San Bento». Diario de Noticias, cuyas fuentes son los círculos gubernamentales, considera que se trata de un desmentido y cita en su apoyo, declaraciones de Manuel Alegare, secretario de Estado para la Información, asegurando que no está en preparación ningún cambio y que los eventuales reajustes del equipo ministerial no alterarán ni la estructura, ni la política, ni el programa del Gobierno.
Fuentes próximas al propio Consejo de la Revolución nos aseguraron que este órgano está actualmente preocupado por problemas de las Fuerzas Armadas, tales como su reestructuración y el nuevo «Código de Disciplina Militar». Se trata de un esfuerzo de estabilización que, respetando las normas de antigüedad y competencia, evite controversias militares. El punto más caliente de la discusión sería la decisión de citar ante los consejos superiores de disciplina a los oficiales acusados de sevicias contra presos políticos, después del 25 de abril, entre los eventuales procesados figuran nombres como los del almirante Rosa Coutinho, Dinis de Almeida (del Ralis) o Campos Andrade (del Regimiento de Policía Militar).
Si algunos de los inculpados son conocidos por sus vínculos con la extrema izquierda, la mayoría no tienen otra filiación que la de pertenecer al Movimiento de las Fuerzas Armadas.
Ayer, un grupo de abogados de extrema izquierda, ligados a algunos de los militares inculpados (entre ellos uno de los abogados de Otelo Saraiva de Carvalho), ha presentado un contra-relatorio, en el que se ataca violentamente al presidente de la República, al Consejo de la Revolución y a la Asamblea de la República, por haber pronunciado un juicio difamatorio, anticipando la decisión que compete a los tribunales.
Por su parte el almirante Rosa Coutinho, ha tomado la iniciativa de solicitar ser juzgado por el consejo de disciplina de la Armada, por considerarse ofendido en su honra militar.
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