Una gran respuesta del pueblo
( ... ) El referéndum ofreció -y así lo constatarán las cifras finales- niveles suficientes de autenticidad y de libertad. No hubo brechas generacionales, como algunos esperaban. Tampoco fraccionamientos que obedecieran a algo más que a consignas de grupos o partidos. Y reinó, por encima decualquier otra característica, un perfecto orden.Los españoles ayer, tanto los más, que votaron, como los menos, que se abstuvieron -algunos de ellos por pura estrategia política, tomando posiciones ante las elec ciones que el propio referéndum provocará-, todos juntos en suma, dijeron -dimos- un estimulante ejemplo de convivencia. Por enci ma de la anécdota y del reparto de convicciones. Dando un primer paso esperanzador en el camino de una democracia que, a partir de hoy, tiene camino despejado para ir perfeccionándose, para conseguir ser el fiel reflejo de los deseos del pueblo entero, fecundada y promovida por las plurales corrientes de pensamiento y opinión que ya han comenzado a de cantarse.
Definitivamente, ayer el referéndum lo ganamos todos. Incluso los que piensan haberlo perdido.
16 diciembre