Denuncian la competencia ilícita del "bingo" en Vigo
Empresarios de salas de fiesta, discotecas y salas de baile han denunciado el bingo de Vigo por supuestas irregularidades administrativas y competencia desleal. La denuncia se formula a la autoridad gubernativa a través de la Organización Sindical.
El juego del bingo o lotería televisada no ha empezado con buen pie en Galicia. En Santiago de Compostela, las presiones de los socios han obligado al aero-club a cancelar su compromiso con la empresa que explotaba el juego, que ahora administra la propia sociedad. En Vigo, una publicación, El Pope, ha denunciado que el casino, sociedad clasista y cerrada durante mucho tiempo, ha abierto sus puertas a todo tipo de personas para jugar al bingo, y entre esos jugadores abundan a ciertas horas las chicas de barra y alterne.
La denuncia de los empresarios vigueses está motivada porque el juego, que funciona en el casino y el Liceo Marítimo de Bouzas, acapara a la casi totalidad de los noctámbulos. Los denunciantes consideran que esto se hace ilícitamente, ya que sus informes son de que la tolerancia para el bingo se limita a sociedades no lucrativas que exploten directamente el juego -aquí existe un intermediario-, con dos sesiones semanales como máximo -se dan cuatro y cinco- y con participación exclusivamente de socios.
EL PAÍS ha podido averiguar que existen fundadas razones para suponer que, al menos el bingo más importante, situado en el Casino, sociedad que hace tiempo tuvo problemas con un socio por denunciar la existencia de una timba en los locales, tenía autorización gubernativa limitada, que habría caducado hace varias semanas.
Por otra parte, los denunciantes argumentan que si el caso del bingo no se regulariza se verán forzados a no pagar seguros sociales ni los salarios de su personal -son más de tres centenares los trabajadores afectados- porque los negocios se hunden.
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