Comienza la conferencia de Ginebra en un ambiente de desconfianza

La conferencia de Ginebra sobre la formación de un Gobierno de transición hasta la entrega del poder a la mayoría negra se inició ayer por la tarde en Ginebra.

En la sesión inaugural han asistido, bajo la presidencia del embajador británico en las Naciones Unidas, Ivor Richard, cuatro delegaciones nacionalistas y el primer ministro de Rodesia, Ian Smith. Las delegaciones africanas están encabezadas por Robert Mugabe (Unión Nacional Africana de Zimbawe, ZANU,) que a la vez actúa como portavoz del Ejército de Liberación de Zimbawe; Joshua Nkmo (facción interior del Consejo Nacional Africano), el obispo Abel Muzorewa (a la externa del Consejo Nacional Africano) y el reverendo Ndabaningi Shitole (fundador del ZANU). Como observadores han estado presentes el presidente del Consejo Ministerial de la OUA, un representante de la Commonwealth y dos de los países llamados del «frente» por su vecindad con Rodesia.Horas antes de que se iniciase la conferencia, el ambiente que imperaba era la mutua desconfianza entre las delegaciones nacionalistas y blanca. «Ustedes pueden apreciarlo en la atmósfera que reina en este edificio y en la ciudad», dijo a los periodistas el presidente de la conferencia, Ivor Richard.

Para el presidente esto está claro, «el problema es cuándo y cómo habrá Gobierno negro en Rodesia». No descartó que en el transcurso de los debates se presenten nuevos problemas. Richard dijo a los periodistas que estas preguntas no obtendrían respuesta «hasta dentro de cinco o seis semanas, si es que la conferencia tiene éxito».

La noticia de que el Gobierno rodesiano había rechazado la puesta en libertad de los presos políticos nacionalistas como habían exigido los dirigentes africanos, hizo aumentar al pesimismo con que se han abierto las negociaciones.

Mientras tanto, el ZIPA, Ejército Popular de Zimbawe, la principal fuerza guerrillera que opera en Rodesia, emitió ayer un comunicado en el que denuncia la conferencia como «una maniobra del imperialismo destinada a implantar en Salisbury un Gobierno africano fantasma». El ZIPA declara que seguirá la lucha hasta lograr en Rodesia «una paz e independencia auténticas».

Ante el ambiente de pesimismo que reina en las conversaciones, Estados Unidos ha cambiado de forma imprevista su postura de no querer desempeñar un papel activo en la conferencia, a pesar de las reiteradas peticiones de lan Smith en el sentido de que el secretario de Estado norteamericano se trasladase a la ciudad suiza para mediar entre las partes.

Continúa el éxodo blanco

Rodesia informó ayer haberse registrado un nuevo éxodo de blancos en el mes de septiembre, con lo que la salida de blancos del país en los nueve primeros meses del año se cifra en 4.738.

Las estadísticas oficiales reflejan que el mes pasado salieron de Rodesia 1.240 blancos. Actualmente hay 277.000 blancos frente a más de seis millones de negros.

La emigración ha presentado características similares desde abril del presente año, a consecuencia del impacto producido por el desarrollo de los acontecimientos en Angola.