Lefébvre, tras su visita al Papa

« Yo continúo como lo hizo siempre la Iglesia pero no quiero separarme de la Iglesia», declaró ayer por la mañana en su seminario tradicionalista de Econe (Suiza), monseñor Lefébvre en una conferencia de prensa. En la misma reunión, el purpurado aseguró que en su entrevísta con el Papa, el pasado día 11, «el Santo Padre estuvo severo conmigo, reprochándome mi actitud». Confirmó también que «fundamentalmente, nada ha cambiado» y que él le había dicho a Pablo VI: «Todo está en sus manos, autorizándonos a hacer la experiencia de la tradición». El Papa no le respondió, indicándole que debía reflexionar y consultar las congregaciones romanas.Anteanoche en una entrevista exclusiva a latelevisión francesa se manifestó en términos semejantes, añadiendo: «No fue una negociación, y la entrevista no ha resuelto nada». En esta ocasión desmintió haber pertenecido al OAS (organización fascista, que defendió la Argelia francesa) y a Acción Francesa.

Ayer eran esperados en Econe los 25 jóvenes seminaristas que siguen los cursos tradicionalistas para iniciar las clases. «De momento -declaró el Papa de Econe-, no habrá nuevas ordenaciones (su suspensión a divinis, el pasado junio, fue decidida por Roma a causa de la ordenación de seis seminaristas), pero «todo continuará como antes».

EL PAIS intentó desde París hablar directamente con monseñor Lefébvre. Para ello se puso en contacto telefónico con la asociación Pío X, una de las bases del integrismo. Su secretario declaró: «Todo el mundo quiere ver a monseñor Lefébvre. Pero monseñor tiene mucho trabajo y tiene que predicar la buena palabra. Todos preguntan por monseñor Lefebvre. Recen ustedes a los ángeles y a la Virgen María para que les pongan en el camino de monseñor Lefébvre».