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Mil muertos en el maremoto de Filipinas

Cerca de un millar de personas murieron como consecuencia del terremoto y la gigantesca ola que arrasó el sur de Filipinas a primeras horas de ayer, según las últimas cifras oficiales.

Sin embargo, el jefe naval encargado de las operaciones de rescate, aseguró que el presidente Marcos comentó que la lista de personas fallecidas podría ser más elevada.

Después de la catástrofe, unas 100.000 personas han perdido sus hogares. El presidente Fernando Marcos, habló ayer al país y anunció que no existía el peligro de que un nuevo y mayor terremoto asolase la populosa región de Manila, puesto que la sacudida del lunes «había liberado muchas de las tensiones de la corteza terrestre».

Ayer, el observatorio geofísico de Manila reveló que la intensidad del seismo fue de 7,8 en la escala abierta de Richter y que el epicentro del movimiento telúrico se situó en un punto a 180 kilómetros al sur de Zamboanga.

El movimiento sísmico provocó gigantescas olas de más de seis metros de altura que devastaron la zona costera de la isla de Mindanao

El terremoto de China

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En lo que concierne a la sacudida telúrica que se registró a prime ras horas de ayer en la región china de Chentung, las autoridades informaron que el epicentro se situó en una ciudad de 50.000 habitantes, Mienyang, importante centro comercial y fabricante de sedas.Testigos accidentales próximos al lugar del acontecimiento, comentaron que la intensidad del seísmo fue sensible, pero que no se vieron síntomas de que se produjesen graves pérdidas humanas, por cuanto los sismólogos chinos habían prevenido a los habitantes de esta región hace unos días y la mayor parte de la población se encontraba alojada en el campo. De todas maneras, ayer, vehículos militares recorrieron las calles de las principales ciudades de la región de Chentung, como Sian y Chungking, avisando a los vecinos de que se alejasen de los edificios. En esta última ciudad, técnicos alemanes y holandeses que están trabajando en la construcción de una fábrica de fertilizantes, comunicaron que se encontraban bien y que no se había pensado en, su evacuación.

Mientras tanto, los habitantes de Pekín han comenzado a volver a sus hogares y las brigadas de socorro siguen trabajando sin descanso en las zonas de Tang Shan siniestradas por el movimiento sísmíco del pasado 28 de julio. Algunas fábricas e instalaciones han comenzado a funcionar, pero se tiene la impresión de que más de la mitad de la ciudad de Tang Shan debe se reconstruida. Seísmo en Japón En la tarde de ayer se supo que la zona de catástrofes sísmicas, que asoló regiones del Extremo Oriente, estaba comprendida en un triángulo formado por Chentung Mindanao y la isla japonesa de Hondo, donde un seísmo conmovió el suelo del territorio septentrional de la isla.

Sin embargo, el servicio meteorológico japonés comunicó que el seísino se consideró como moderado y que los daños habían sido de escasísima importancia. La policía de la ciudad de Shimoda, cercana al epicentro, localizado en la península de Izu, al sureste de Tokio, dijo que sólo había observado algunos resquebrajamientos en cieirtas edificaciones. El temblor marcó tres grados en la escala sismológica japonesa, que consta de siete.

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