El viaje del Rey a París determinará el cambio político

Los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, visitarán oficialmente Francia del 27 al 29 de octubre próximo, según anunció ayer el Palacio del Elíseo, en París, y en Madrid la Oficina Española de Información Diplomática. Sin precisar la fecha exacta, EL PAIS anticipó la noticia el pasado 30 de julio. Un portavoz de la presidencia de la República francesa manifestó, entre otras cosas, que el señor Giscard «se congratula de la visita a Francia del Jefe del Estado de la nueva España».

, La visita oficial a Francia de los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofia, dio lugar a diversas interpretaciones desde que rue anunciada por el Palacio del ElíseoEn primer lugar, según el portavoz del Elíseo, el presidente Giscard d'Estaing «se alegra de esta visita». La misma fuente afirma que el viaje de los Reyes servirá para resaltar la voluntad de ambos pueblos, «que se respetan y se aprecian desde siempre», de estrechar sus lazos de amistad y cooperación.

En algunos medios diplomáticos, inmediatamente se asoció esta visita con las posibles elecciones en España. «Todo parece indicar -se opinó en estos círculos- que no habrá ningún tipo de consulta popular en España antes de la visita de Juan Carlos a Francia.» Se dejaba entender anoche que el impacto de la «gran acogida que, sin duda, dispensará a los Reyes el presidente Giscard puede tener una significación en el interior».

Por otra parte, fuentes allegadas a los medios diplomáticos españoles relacionaron inmediatamente la visita del Rey con los efectos de las medidas de amnistía que se tomaron recientemente. «No parece probable -se comentó a EL PAIS- que venga el Rey y aún no se haya resuelto favorablemente el problema de los exiliados.

También es de anotar, contrariamente a todo lo dicho, que los últimos días en los medios políticos de la oposición, en la capital francesa no se excluyen sorpresas en un porvenir inmediato. Esas novedades pudieran producirse si, de una manera inmediata, el Gobierno actual no «liquida definitivamente el contencioso que aún entorpece la auténtica reconciliación nacional». Y, a este respecto, incluso se dan nombres ya de personalidades del régimen para un Gobierno de recambio.

La incertidumbre en torno al propio Gobierno francés constituye un factor complementario en las especulaciones sobre el viaje del Rey. La posibilidad de que Giscard cambie el actual Gobierno por otro de orientación menos atlántica -el nombre de un gaullista, Robert Galley, suena insistentemente en los últimos días-, afectaría directamente a las relaciones franco-españolas. Galley, actual ministro del Equipamiento, ha mantenido contactos con la derecha liberal española.