Objetores de conciencia expulsados de la catedral de Valencia
El grupo de objetores de conciencia que mantienen una huelga de hambre desde el lunes pasado -unos 20 jóvenes entre chicos y chicas-, fueron expulsados el pasado jueves de la catedral de Valencia, donde se habían guarnecido, según informa la agencia Cifra.La expulsión la decidió el fabriquero catedralicio, encargado de mantener el orden en el templo. Los objetores trataron de establecer contacto con el obispo auxiliar, monseñor Jesús Plá, que se encarga del gobierno de la diócesis, para que les autorizase a seguir en el templo, pero, según manifestaron, no ha habido manera de llegar hasta el obispo. Al no autorizarles a continuar en el templo, los ayunantes permanecieron en la puerta de los Apóstoles de la catedral, que se encuentra en la plaza de la Virgen. De las cinco personas que iniciaron el ayuno, el pasado jueves, lo abandonaron dos, que han sido sustituidas por otras dos.
La objeción de conciencia está reconocida en todos los países de Europa Occidental, salvo en Grecia, Suiza y España. En nuestro país, los objetores suman unos 500.
El proyecto de voluntariado para el desarrollo presentado por la comisión nacional de Justicia y Paz al Gobierno el pasado 5 de mayo de 1975 -avalado por más de 1.200 firmas de jóvenes dispuestos a realizarlo si se aprobase-, se mantiene congelado. Aunque el Gobierno acusó el recibo, las órdenes de incorporación a filas siguen llegando a aquellos que se declaran objetores de conciencia. Son más de trescientos los que actualmente cumplen condena en diversas cárceles por esta oposición al servicio militar y defensa de un servicio social.
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