Balanza y libro de reclamaciones para las panaderías
De acuerdo con las normas que próximamente se harán públicas y que han sido firmadas por el ministro de Comercio, Leopoldo Calvo Sotelo, todos los despachos de pan estarán obligados a disponer de una balanza y un libro de reclamaciones, según informa Europa Press.La disposición del Ministerio de Comercio, pone de relieve que los propietarios de los puntos de venta de pan, serán responsables en caso de que se compruebe la existencia de piezas que no tengan el peso fijado.
Con esta norma, los responsables de las tahonas estarán obligados -igualmente- a denunciar las posibles mermas de peso en las piezas que reciban de las industrias panaderas, en caso de que tengan conocimiento del posible fraude.
En el caso de que los vendedores de pan no hayan notificado la falta de peso, caso de existir ésta, podrán ser sancionados como partícipes en el fraude de peso de un artículo comercial.
Según el nuevo decreto regulador de la industria panadera, los distintos tipos de pan, que ahora se distinguen por su peso y no por «nombres» (pistolas...,) deben tener entre sí una diferencia en peso de al menos 100 gramos, que permiten distinguirlas piezas a la vista.
