Villar Mir destaca el papel de las Cajas en el negocio público

«El Ministerio ha tutelado, tutela y tutelará a las Cajas, impulsándolas, pero éstas son necesariamente un instrumento al servicio de la comunidad y siempre se mantendrán las condiciones que la necesidad de la colectividad, imponga», ha dicho Villar Mir en una rueda de Prensa celebrada en Zaragoza.

Posteriormente, durante el acto de clausura de la Asamblea de la Confederación Española de Cajas de Ahorro, refiriéndose al mismo tema dijo:«Un dispositivo crediticio de la envergadura del que las Cajas representan, tiene que responder a una exigencia de solidaridad nacional y tiene que adquirir conciencia de que, diseminadas por el país, no son entes aislados sino coordinados en una acción conjunta y articulada.

Las zonas menos dotadas económicamente, dijo, han de recibir mayores recursos que, los proporcionados a su capacidad de generar, y eso implica una redistribución de recursos que obligadamente incumbe al crédito oficial, en una actuación orientada a corregir desequilibrios regionales y no a consolidarlos».

Villar Mir, citó algunas cifras relativas a las Cajas, tales como los 29 millones de impositores con que cuentan en 1976, a razón de una media de 50.000 pesetas, distribuidos en 6.000 sucursales. También hizo referencia a la cartera de fondos públicos que en 1975 representaba el 11 por 100 del total de depósitos, mientras en 1962 representaba el 50 por 100. El Ministerio de Hacienda -dijo- ha permitido el trasvase de financiación hacia los valores industriales, de mayor rentabilidad, que hoy se cifran en el 31 por 100 del pasivo, cuando representaban sólo el 7,6 por 100 en 1962.

"Si como resumen de esta evolución -continuó- pensamos que en 1962, fecha que venimos tomando como índice, los fondos públicos de la Banca y de las Cajas reflejaban una cantidad similar, de en ambos casos de 60.000 millones de pesetas, hoy, al leer las cifras de final de 1975, vemos que en vuestro caso, estos fondos públicos ascienden a 180.000 millones de pesetas, en tanto que, en la Banca han llegado a superar los 40.000 millones".

"Para el Ministerio de Hacienda -concluyó el ministro- sois hijas predilectas y queremos ofreceros sin límites nuestra ayuda, pero también debemos inculcarnos en todo tiempo y ocasión, vuestra inexcusable participación en el negocio público para el que vocacionalmente os habéis establecido".

Previamente el señor Sancho Aronda, presidente de la Confederación, había pedido al ministro, como lo hiciera en el acto de apertura, que se permitiera a las Cajas ir hacia una mayor liberalización de sus inversiones con lo que se posibilitaría la acción de éstas en su territorio.

«Si parece justo -dijo el señor Sancho Aronda-, que corra a cargo de las Cijas de ahorro la financiación de sectores prioritarios del país,- también es necesario que no se olvide el origen y localización de todas ellas».

Por la mañana, durante la rueda de Prensa antes mencionada, Villar Mir, había asegurado que no hay decisión todavía sobre el trasvase del Ebro. «La decisión final -dijo- es una decisión del Gobierno y pesará en su ánimo el tratar de compensar los desequilibrios regionales».

Respecto a la inflación, mantuvo su tesis de que depende fundamentalmente de la propia conciencia de los españoles.