La Real jugará la Liga Europa y el Betis, la Conference
El conjunto vasco se impone a los andaluces en un festivo Villamarín gracias a su pegada y la calidad de Merino
Todo lo que no tuvo el Betis le sobró a la Real Sociedad. Sobre todo, pegada y eficacia, valores básicos en la élite. El resultado fue que la Real se hizo con la sexta plaza con toda justicia y, por lo tanto, jugará la Liga Europa. Y lo hará por quinta vez consecutiva y después de vencer a un rival directo en su estadio, ante cerca de 60.000 personas. Tuvo mucho mérito el conjunto vasco.
El Betis fue un despropósito. No jugó mal en la primera mitad, pero en la segunda ofreció regalos incomprensibles. Por ejemplo, en el minuto 64, Abde, con el 0-2, decidió tirar un penalti a lo Panenka que le detuvo Remiro. El marroquí lanzó y no lo hizo la estrella del equipo, Fekir, en una evidente baja forma. La Real festejó sobre el terreno de juego su gran triunfo europeo. Es un equipo muy hecho, que ha disputado con éxito todas las competiciones que ha disputado, incluida la Liga de Campeones.
El Betis, por su parte, y a pesar de la derrota, con mala fortuna, eso sí, queda séptimo y disputará la Conference League, ayudado por el empate del Madrid en Villarreal. El último choque en el Bernabéu es intrascendente, y probablemente, se jugará el próximo viernes. Eso sí, el conjunto andaluz se meterá en Europa por cuarta vez consecutiva, algo inédito en su historia. Deberá jugar una eliminatoria previa en el mes de agosto.
Los de Pellegrini afrontaron esta final por Europa, en especial por la Liga Europa, con las bajas importantes de Isco y Guido. Dos puntales en el engranaje de un equipo al que, además, la Real golpeó con precisión quirúrgica. Johnny llegó tarde en una acción con el propio Brais, quien lanzó un misil, a los cinco minutos, que batió a Rui Silva. Un golazo de falta que alteró el guion del partido. No se ven muchos en la competición.
Obligó al Betis a atacar. Y los andaluces, muy bien liderados por Fekir y Ayoze, reaccionaron con múltiples llegadas al área de una Real en la que no estaba Le Normand, lesionado en el calentamiento. El Betis tiró hasta 12 veces sobre la meta de Remiro, incluido un disparo al larguero de Riad. La Real lo hizo en tres ocasiones, metiendo dos goles. Merino le robó el balón a un confiado Fornals y combinó con Oyarzabal. El delantero le puso el balón por delante y el propio Merino batió sin remisión a Rui Silva. El conjunto vasco, con una gran pegada, se imponía a un buen Betis, pero demasiado blando en ambas áreas.
La Real asentó su dominio en la segunda parte. Al Betis, además, le pasaron cosas raras. Abde lanzó un penalti a lo Panenka y todavía el VAR le anuló, con justicia, un gol de Ayoze, que rozó el balón con la mano antes de batir a Remiro. No era el día del conjunto andaluz, sin duda. Sin suerte y sin gol, todo le salió mal.
El Benito Villamarín, que estaba preparado para ser una fiesta, se tuvo que rendir ante la superioridad de esta Real que hizo las cosas como debía para conquistar su plaza en la Liga Europea. El Betis, además, acabó entregado, sin capacidad para hacer daño a su rival. “El equipo ha competido muy bien a lo largo de la temporada. Eso tiene mucho valor y aunque no nos hubiéramos metido en la sexta plaza la nota era de sobresaliente en esta campaña. Hemos dado la cara y estoy muy contento con esta plantilla. Ha debutado Jon Martin con 18 años en un campo como el Villamarín y estoy muy contento”, afirmó Imanol Alguacil. “Ha sido algo injusto. Jugamos un gran primer tiempo, como nos pasó ante el Rangers, y nos eliminaron. La Real empezó con un golazo y luego jugamos muy bien, con muchas ocasiones de gol. El fútbol es así. En el segundo tiempo fue distinto, pero hemos logrado el objetivo de clasificarnos en Europa y eso es muy importante”, aclaró, por su parte, Manuel Pellegrini. “Abde no era el encargado de tirar el penalti. Parece que lo pidió él y lo lanzó mal, era un momento muy importante”, finalizó el entrenador del Betis.
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