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Felix Kroos: “Toni se ponía más nervioso cuando jugaba yo que cuando lo hacía él”

Entrevista con el hermano del centrocampista del Real Madrid, que jugó en el Unión Berlín, rival de los blancos este miércoles en la Champions

David Álvarez
Felix Kroos
Felix Kroos, en una imagen reciente tomada en Berlín.Club of Gents

En el Real Madrid-Unión Berlín de este miércoles en el Bernabéu habrá un Kroos en cada bando (18.45, Movistar). Toni con la camiseta blanca y su hermano, Felix, integrado en la expedición oficial de los alemanes. El pequeño de los Kroos, ya retirado con 32 años (Toni tiene 33), fue fundamental en uno de los momentos más importantes de la historia de un club que se estrena este miércoles en la Champions después de solo cuatro temporadas en la Bundesliga. Felix Kroos recuerda por videollamada desde Berlín, adonde regresó tras dejar el fútbol, qué le sedujo de un equipo al que no quería ir y con el que terminó subiendo a Primera siendo uno de los capitanes.

Pregunta. En 2016 el Werder Bremen le cedió al Unión Berlín, que entonces estaba en Segunda. ¿Cómo terminó allí?

Respuesta. Cuando mi agente me dijo que había una oferta del Unión Berlín, le dije que no al instante, ni tenemos que hablar de eso. Yo tenía una situación difícil en el Bremen, donde ya no jugaba mucho, pero no quería ir a Segunda. Hablé con el entrenador y me dijo solo cosas positivas, que es lo que quieres escuchar cuando estás en una situación así. Después de dormir bien dije: ‘Vale, voy a Berlín porque quiero jugar, voy tres meses y vuelvo a Bremen’. Pero después de una semana en el Unión, ya no quería ir a ningún otro sitio.

P. ¿Por qué?

R. Hay un sentimiento especial aquí. Del utilero al presidente: es un equipo que te da buenas sensaciones. Es difícil de describir, tienes que estar aquí para verlo y sentirlo, pero es especial. Si ganas un partido, está bien; pero si pierdes, no es tan malo. Te sientes muy bien aquí como jugador. Siempre te sientes valorado: tanto si juegas como si no juegas, te aprecian como persona. Después de una semana, no quería volver. Y cuando me fui, no me quería ir, pero fue una decisión empresarial del club. Cuando me retiré, que fue la primera vez que pude decidir por mí mismo dónde quería vivir, escogí Berlín.

Ni siquiera Toni puede explicar las remontadas con palabras. Es una sensación en el campo. Miras a los otros y ves que creen.

P. Cuando consiguieron el ascenso en 2019, dijo que era como un Mundial para usted.

R. Sí. Fue muy especial para mí. Sabía que no iba a ganar un Mundial, era realista. Y cuando estás aquí y ves a los aficionados después de que subiéramos, lo agradecidos que estaban... Fue tan tan especial estar en el equipo que subió a la Bundesliga por primera vez en la historia del club... Cuando hablo ahora de eso, cuatro años después, siempre se me pone la piel de gallina.

P. Cuatro años más tarde se estrenan en la Champions en el Bernabéu, escenario de remontadas increíbles. ¿Cómo se puede explicar eso que su hermano vivió desde dentro?

R. Ni siquiera Toni puede explicarlo con palabras. Creo que es una sensación en el campo. Miras a los otros y entonces sabes que ahí hay uno que cree, ahí hay otro que cree; entonces yo creería también. Y ahí hay alguien que tiene experiencia con una remontada... Es una sensación entre los jugadores. No es que el entrenador tenga que decir algo, o algún jugador tenga que decir nada. Tienes que mirar a los ojos a tus compañeros y decir, no pasa nada, podemos hacerlo. Lo has hecho una vez, dos veces, tres veces; entonces lo harás otra vez. Eso salta al público, y los aficionados lo sienten también, tienen un buen presentimiento: ellos creen, entonces nosotros creemos también, y creamos un ambiente en el que los contrarios ven, oh, aquí cree todo el mundo en que van a remontar. Y ha pasado muchas veces.

P. Tiene un podcast semanal con su hermano. ¿Cómo les convencieron para hacerlo?

R. Es gracioso. Tuve la misma reacción que cuando me dijeron que fuera al Unión Berlín. Lo primero que pensé es: ‘No, no quiero hacerlo’. Lo dijimos los dos. Venimos de una parte de Alemania [Greifswald] donde la gente no habla mucho. ¿Cómo llenas una hora semanal de podcast cuando no te gusta hablar? Pero lo pensamos y dijimos: ‘En los últimos años solo hemos jugado al fútbol, nada más, probemos algo nuevo’.

P. Y opinan de todo, algo cada vez más raro en los futbolistas.

R. Es lo que somos. No dudamos en dar nuestra opinión sobre las cosas. No queremos tener a un 100% que dicen: ‘Sí, lo veo como ellos’. Siempre está bien cuando tienes 50%-50%, unos que te aman y otros que te odian, es una buena mezcla. Das tu opinión, y la defiendes, es lo que somos y no tenemos miedo a decirlo.

P. ¿Han hablado de Rubiales?

R. No hemos hablado de eso por los tiempos. A veces pasa algo un martes y nosotros grabamos el lunes, así que todo el mundo ya ha hablado sobre ello. No hemos hablado de ello, no porque no queramos hacerlo. Pero es un tema en el que para mí, y para nosotros, no puedes tener dos opiniones: solo una opinión, que es un error tan tan tan grande... También cómo lo manejaron justo después. Cuando haces algo, al día siguiente tienes que salir y pedir perdón. No mejora la situación, pero es todo es lo que tienes que hacer: pedir perdón y ser un hombre.

Es difícil que te comparen con tu hermano mayor. No puedes ganar. Pero me decía a mí mismo: “Conseguiste tu sueño de ser futbolista profesional. ¿Cuánta gente puede decirlo?”.

P. Otra de las cosas que hace es dar conferencias sobre su experiencia. Uno de los temas que trata es el manejo de la presión y lo que supone ser hermano de Toni Kroos. ¿Qué cuenta?

R. De joven, es difícil que siempre te comparen con tu hermano mayor, que estaba ya al máximo nivel, y que incluso mejoró los años siguientes. Si haces algo bueno, lo haces porque eres el hermano de Toni; si haces algo mal, oh, eres solo el hermano pequeño. No puedes ganar. Cuando eres joven es difícil saber cómo lidiar con eso. Tienes que encontrar tu propia manera. Tienes que mirar solo lo que has conseguido. Siempre me decía a mí mismo: ‘Conseguiste tu sueño de niño de ser futbolista profesional, ser jugador de la Bundesliga’. También jugué la Champions. ¿Cuánta gente puede decir que ha conseguido alcanzar su sueño de niño? Tienes que hablarte y decirte: ‘Eh, lo has hecho todo bien, tu sueño se hizo realidad’. Y ayuda. A mí me ayuda no sentir celos de Toni. Soy su mayor fan. Me pongo más nervioso cuando juega él que cuando jugaba yo.

P. ¿Está usted más nervioso por Toni que él mismo, que nunca lo parece?

R. Sí, y creo que al revés también. Toni se ponía más nervioso cuando jugaba yo que cuando lo hacía él. Es el sentimiento de no tener el control. No puedo ayudar, solo sentarme ante la tele y cruzar los dedos.

P. ¿Toni siempre fue así? ¿Tampoco se ponía nervioso de niño?

R. Yo siempre me enfadaba, cuando quería ganarle y le entraba duro, y él estaba siempre tan relajado. Me enfadaba más verle en el otro equipo sonriendo y relajado. De eso sí estoy celoso.

P. ¿Tampoco le ponían nervioso, los exámenes, por ejemplo? ¿No tenía miedos?

R. Tendré que hablar con él de eso, es una buena pregunta. Se lo preguntaré, pero creo que no, porque él siempre tenía la sensación de que iba a encontrar una solución para seguir. Creo que me dirá lo mismo que sobre los partidos de fútbol.

P. A Jude Bellingham lo tuvieron en Alemania antes de su fichaje por el Real Madrid. ¿Le ha sorprendido su rendimiento?

R. No me sorprendieron sus cualidades. Me sorprendió más que pudiera empezar así a la edad que tiene. No hay duda sobre sus cualidades, pero mostrarlas en ese escenario, en el Real Madrid, donde más ojos hay sobre ti, con mucha más presión, eso muestra sus cualidades mentales. Pero quiero ver cuando juegue algunos partidos no tan buenos —eso va a pasar—, cómo responde a eso. Toni dice que mentalmente puede responder a eso también. Es un jugador increíble y creo que va a dominar los próximos diez años. Pero denle algo de tiempo, por favor, cuando tenga algún partido malo. Es demasiado bueno para no responder.

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Sobre la firma

David Álvarez
Sigue la información del Real Madrid y la selección española en EL PAÍS, donde ha sido redactor jefe de la sección de Deportes. Ha cubierto los Juegos Olímpicos, el Mundial de fútbol y la Eurocopa. Antes trabajó en ABC, El Español, ADN, Telemadrid, y La Gaceta de los Negocios. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra.

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