Gareth Bale, tras su llegada al LAFC: “Mi objetivo es ganar un campeonato”

Gareth Bale tuvo una probada el viernes de lo que le espera como la nueva estrella del LAFC, el equipo que llegó a la MLS en 2018 y hoy es uno de los grandes favoritos para ganar la Liga. El delantero galés pisó la cancha minutos antes de que su ahora equipo venciera en un emocionante derbi, conocido como El Tráfico, (3-2) a los visitantes del Galaxy, uno de los juegos más esperados. Bale fue ovacionado por los seguidores ante un estadio lleno. Este lunes, al ser presentado por el club, ha hecho la promesa que los fanáticos querían escuchar. “Puedo ayudar a mejorar al equipo y nuestro objetivo es ganar un trofeo. Haremos todo lo posible para lograrlo”, dijo en la conferencia de prensa.

Bale, quien cumple 33 años el sábado, ha dejado atrás al Real Madrid, un club con el que tuvo una complicada relación a pesar de ganar tres ligas y cinco Champions en ocho temporadas. Ahora aterriza en Los Ángeles, donde ha sido fichado por una temporada con un contrato que le permite ser agente libre y un salario de menos de dos millones de dólares. “No será una transición sencilla, pero es un gran reto para mí. Llegar a la mitad de una temporada es algo diferente, pero me he mantenido en buena condición en Europa”, añadió el jugador.

“Tengo varios años por delante. No vine hasta acá solo para estar seis o 12 meses. He llegado para tratar de estar lo más posible y de hacer lo mejor que pueda. Quiero dejar mi marca en este equipo y en esta liga”, consideró Bale, quien fue presentado por los dueños del equipo con una camiseta que no tenía ni su apellido ni número en el dorsal. La prensa local ha calificado el acuerdo del galés con el club como uno de beneficio común para que el delantero gane minutos de juego y llegue en forma al Mundial de Qatar, el primero para el combinado de Gales desde 1958.

Bale refuerza ahora a un equipo que fichó este verano a otro gran veterano de Europa. A finales de junio fue presentado en el club angelino el italiano Giorgio Chiellini, quien aterrizó en EE UU tras 17 temporadas en la Juve. “Este equipo es perfecto para mí”, dijo a la prensa el defensa, de 37 años, y quien ha disputado 117 partidos con la selección de su país desde 2004.

La contratación de Bale y Chiellini es percibida por los analistas deportivos como un cambio de estrategia de la directiva del club, quien había apostado en los cuatro años del club por contrataciones de jóvenes talentos sudamericanos. Una serie de fichajes locales en el mercado de invierno afianzaron la estructura del equipo comandado por el mexicano Carlos Vela y el uruguayo Diego Rossi. LAFC es líder en la conferencia oeste con 39 puntos, tres por delante de Austin. Los Red Bull de Nueva York son los líderes del este con 33 puntos.

El sistema de puntos ha dado al LAFC su primer trofeo en la MLS. En 2019 el equipo ganó el llamado Supporters Shield, el reconocimiento a la escuadra que suma más victorias en la competencia. Los angelinos lograron una marca de 72 puntos, un récord que fue batido el año pasado por el New England Revolution. La ambición del grupo de inversores, sin embargo, es que esta temporada llegue un título en la postemporada. “Bale comparte nuestra ambición de ganar trofeos. Consiguió 19 en el Real Madrid”, dijo a manera de presentación el gerente del equipo, John Torington.

La MLS a la que llega Bale tiene poco que ver con la liga a la que aterrizaron David Beckham, Roy Keane o Zlatan Ibrahimovic. “Creo que el nivel ha subido mucho y está muy por encima de lo que la gente en Europa cree. La calidad está mejorando, los estadios están mejorando, los equipos están mejorando. Es una liga al alza”, dijo con seguridad Bale, aunque admitió que la diferencia horaria no le permitía ver tantos partidos como le gustaría.

Otra figura del fútbol europeo ha vuelto esta semana a Estados Unidos. El exjugador inglés Wayne Rooney fue fichado como técnico del D.C. United. Es el retorno del hijo pródigo del Manchester United, quien aterrizó en la liga en 2018 y 2019 para jugar en ese mismo equipo.

Hace unos días, Chiellini abordaba con ironía el hecho de que los fichajes más importantes sean tradicionalmente para estrellas internacionales que llegan a la MLS para jugar en la ofensiva. “Los delanteros sirven para vender entradas, pero los defensas sirven para ganar ligas”, comentó entre risas el italiano. En la química entre ellos y el resto del equipo depende la posibilidad de que el LAFC levante su primer título.

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