El Valencia desahucia a sus peñistas
La agrupación, que representa a 356 colectivos y tiene más de 20.000 afiliados, había exigido la destitución del presidente
El presidente de l’Agrupació de Penyes del Valencia, Fede Sagreras, echó este sábado el cierre al local que desde hace 25 años ocupaban los peñistas en los bajos de Mestalla. Luego, otro directivo depositó las llaves en el buzón y se marcharon. El colectivo que representa a los aficionados del Valencia inauguró su sede en el estadio en 1985 por decisión del entonces presidente, Paco Roig, que les cedió un espacio en el campo “para recreo y solaz de sus peñistas”. Contraria a comulgar con las polémicas decisiones del dueño del club, Peter Lim, en el último año, la Agrupación exigió la destitución del presidente Anil Murthy. Su rebelión les ha costado el desahucio.
“Con mucha pena y tristeza abandonamos la sede de l’Agrupació. Hoy ponemos el punto final tras 25 años en las entrañas del estadio. Mestalla siempre será nuestra casa. Mil gracias a todos por vuestra ayuda y vuestro cariño”. Con estas palabras y varias fotos simbólicas de un doloroso adiós en un tuit, la Agrupación dejó Mestalla. Antes, un camión de mudanzas había vaciado el bajo y los había trasladado a la nueva sede. El nuevo local está en la calle Islas Canarias, a escasos dos kilómetros del campo.
A las peñas les ha costado cara su revuelta social, aunque cuando dieron el paso eran conscientes de que el club iba a represaliarlos. Reunidos en asamblea extraordinaria el 28 de agosto, en la sala Rex de Alzira, 228 peñas (92 representadas por un portavoz y otras 136 delegadas) resolvieron en una votación por mayoría absoluta exigirle al propietario del club, Peter Lim, el cese del presidente, Anil Murthy, en un duro comunicado. La carga de profundidad de esa decisión, en un colectivo que representa a 356 peñas y más de 20.000 afiliados, era otra bofetada a Lim y a sus empleados en la ciudad tras las polémicas decisiones del último año. Siempre fiel y domesticada, la Agrupación jamás se había levantado contra el club.
Cuatro días transcurrieron desde la publicación del comunicado hasta que llegó la contundente respuesta del club en una carta en la que advertía de lo que iba a suceder. “El club respeta dicho punto de vista y lo interpreta como el deseo expreso de esta asociación, que siempre ha sido independiente, de revisar su relación a partir de ahora con el Valencia y su dirección”.
La excusa oficial
Una semana más tarde, Anil Murthy, aplastó la insurrección desahuciando a los peñistas de la sede que ocupaban en los bajos del Mestalla. La expulsión se disfrazó con buenas palabras. La tapadera era que el club iba a hacer uso del local para instalar las oficinas de la Fundación VCF. El presidente ofreció a los peñistas trasladarse a otro, más pequeño, que tendrían que compartir con la Asociación de Jugadores. La oferta fue desestimada por las reducidas dimensiones de ese bajo, que no permite acoger las reuniones periódicas que realiza la Agrupación, y por compartirlo con los exjugadores. Murthy les dio 15 días, que se cumplen este domingo, para abandonar el estadio.
Finalmente, el establecimiento que tenían las peñas en Mestalla será ocupado por la empresa Startup Valencia, que representa a las startups valencianas. El objetivo “es de fomentar la innovación e impulsar el ecosistema de emprendimiento tecnológico”. El club anunció el viernes el proyecto de innovación ‘VCF Innovation Hub’, con el que se apoyará a las prometedoras startups de jóvenes talentos de Valencia.
El último acto social que las peñas celebraron en el estadio fue el almuerzo entre la Agrupación de Peñas del Valencia CF y la Delegación de Peñas del Levante UD antes del partido que enfrentó a ambos equipos en la primera jornada de LaLiga el 13 de septiembre.
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