Wang Shuang, la futbolista que se atrevió a salir de China

En un país tan proclive a la emigración como China, son contadas los casos de futbolistas que hacen las maletas para embarcarse en aventuras deportivas fuera del continente asiático. Un claro ejemplo de esta tendencia se puede encontrar en la selección de fútbol femenino, que este lunes se jugará la segunda plaza del Grupo B frente a España (18.00; GOL TV). De las 23 convocadas por Jia Xiuquan, solo una tiene contrato con un club extranjero. Se trata de su gran estrella, la atacante Wang Shuang, que en verano de 2018 se enroló en las filas del París Saint Germain. "Ir a Francia fue como dar la vuelta a mi mundo. Tuve que volver a aprender todo, como un bebé recién nacido", reconocía en una carta publicada en The Players Tribune.

Más información

China mide la madurez de sus Rosas de Hierro

Irene Paredes: “Queremos pasar por encima, no estar cerca”

Con el siete a la espalda, Shuang partirá en la punta de ataque como la principal amenaza de una China que tratará de privar a España del sueño de alcanzar los octavos de final de un Mundial por primera vez en la historia. Lejos de los años en los que el gigante asiático fue una potencia del fútbol femenino mundial, llegando a ser subcampeonas del mundo en 1999, las asiáticas se agarran al talento de la jugadora del PSG, que a sus 24 años se ha convertido el símbolo del rejuvenecimiento del fútbol femenino chino. A pesar de su juventud, ya suma 97 internacionalidades y ha visto puerta en 26 ocasiones, siendo fundamental para ganar la medalla de bronce en la Copa de Asia y la plata en los Juegos Asiáticos, competición en la que fue pichichi con 12 tantos.

En su precoz trayectoria destaca el logro de ser nombrada mejor jugadora de Asia en 2018, un honor que no recaía en una jugadora china desde 2006. En verano de ese mismo año, se decidió a iniciar su aventura en Europa. "Al principio extrañaba mucho a China. El estilo de vida es muy distinto y fue muy complicado. Sobre todo por la barrera del idioma", explicaba en una entrevista con Le Parisien en la que también hablaba sobre las dificultades deportivas que encontró a su llegada: "Es sobre todo una cuestión de naturaleza y cuerpo. Las mujeres chinas, y las asiáticas en general, somos menos resistentes y físicas que las europeas. Es algo que todavía debo mejorar", explicaba.

A pesar de ello, la menuda y habilidosa delantera ha firmado siete goles y ocho asistencias en 18 partidos de Liga, además de un tanto y una asistencia en cuatro encuentros de la Liga de Campeones, en la primera de las dos temporadas de contrato que firmó con los parisinos. "En el campo todo se vuelve más sencillo. Una vez ahí fuera, todas hablamos el mismo idioma y puedo olvidarme de todos los problemas", resumía.

Acostumbrada a jugar con libertad en todo el frente de ataque, su velocidad y su potente pierna izquierda marcan el paso de una selección correosa y ordenada, pero que físicamente está lejos de las mejores. Por eso, cuando poco antes de comenzar el torneo se dio a conocer que sufría unas molestias en su rodilla izquierda, sus seguidores se echaron a temblar. "Está trabajando muy duro en cada entrenamiento para recuperar el ritmo. Estoy convencido de que lo logrará tarde o temprano. No debemos tener prisa", tranquilizó el seleccionador nada más acabar el primer encuentro, que las chinas perdieron ante Alemania, y que Shuang inició en el banquillo. En el segundo, ante Sudáfrica, volvió al once y completó los 90 minutos, por lo que todo hace indicar que ante España estará en perfectas condiciones.

“No quiero que mi llegada a Francia sea vista como un movimiento comercial o como una herramienta de marketing. Estoy aquí por mi calidad como jugadora”, recalcó Shuang nada más aterrizar en París para iniciar su primera aventura en el fútbol europeo. Pero lo cierto es que, a pesar de que los números y las sensaciones transmitidas sobre el verde la avalan, su llegada también le ha servido al PSG para reforzar y expandir su imagen de marca en el país asiático.

Sin ir más lejos, en el año que Shuang lleva en la capital francesa las redes sociales del club en Asia han experimentado un crecimiento de cerca de un millón de seguidores. “Wang Shuang es una formidable embajadora para el club. Ella es un icono en su país y su popularidad se siente por toda Asia con un número de aficionados y una atracción que no dejan de crecer”, reconoció Sébastien Wasels, director general del PSG en Asia.

Su tirón ha sido explotado claramente por el PSG. Además de usar su imagen junto a las de las grandes figuras del equipo masculino, como Mbappé o Neymar, el club ha difundido una serie de vídeos a través de las principales plataformas en China que han acumulado millones de visitas. Titulados Wang Shuang en París, la futbolista es filmada conociendo las costumbres locales, descubriendo la comida típica y visitando los lugares más emblemáticos de la capital francesa.