Marc Gasol: “Me sorprendió que despidieran al entrenador. Yo no lo pedí”

Las acusaciones vuelan a la misma velocidad que los hechos. Marc Gasol, dicen, echó al entrenador de los Grizzlies. David Fizdale fue fulminantemente despedido 18 horas después de haber dejado al pívot español en el banquillo durante el último cuarto, el domingo ante Brooklyn. Se repite la vieja historia. Suele haber un ganador de antemano cuando colisionan la estrella y el entrenador. Lo hubo cuando Magic Johnson se las tuvo con Paul Westhead en los Lakers del curso 1981-1982, o Jason Kidd con Byron Scott en los Nets del 2003-2004, o LeBron James con David Blatt en los Cavaliers del 2015-2016. En los tres casos, los entrenadores fueron destituidos.

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El episodio de los Grizzlies resuena en toda la NBA. LeBron James tuiteó primero: “Necesito respuestas. A mí chico (Fizdale) lo han utilizado de cabeza de turco”. Se explayó en defensa de un entrenador con el que trabajó cuando coincidieron en Miami. “No sé los detalles porque no estoy allí, pero sí sé qué entrenador es Fizdale, cómo se relaciona con los jugadores y por qué cosas no se deja pisotear. Quizá es eso lo que ha pasado: él no va a besar el culo a nadie”.

Pau Gasol salió a la palestra tras el partido en el que anotó 25 puntos para ayudar al triunfo de los Spurs ante Dallas (115-108): “No creo que Marc haya tenido nada que ver con la decisión. Tras la derrota y la forma en que se dio, se puede entender que hay frustración”. El mayor de los Gasol es uno de los que mejor puede conocer la situación, ya que concierne a su hermano y a los Grizzlies, el equipo con el que compitió durante seis temporadas y media. “Marc tiene suficiente experiencia con 32 años como para saber manejar bien esta situación. Lo que está claro es que es el líder que el equipo necesita”, afirma Pau, que también se pronunció sobre el despido de Fizdale: “Es una cosa que sucede en esta Liga, sobre todo cuando el equipo no va bien. Memphis llevaba ocho derrotas seguidas”.

Marc Gasol salió a la palestra para explicar su posición. “Me sorprendió su despido. En absoluto lo pedí. Me enteré después de que Robert (Pera) -dueño de la franquicia- tomara la decisión. Me la hicieron saber, pero no antes”, explicó el jugador español en declaraciones al periodista Peter Edminston. Sobre la percepción de que la prensa y la afición considere que es quien ha fulminado al entrenador, Marc, indica: “No puedo hacer nada al respecto. Todo lo que puedo hacer es ganar y tratar de asumir el problema y mi responsabilidad sobre el balance de vitorias y derrotas que llevamos”.

Diversas fuentes informan de que el dueño de la franquicia, Robert Pera, el multimillonario fundador de la empresa tecnológica Ubiquiti Networks, no tuvo nada que ver en el despido, responsabilidad del general manager Chris Wallace. La franquicia, con su decisión, redobló su apuesta por Marc Gasol, bien porque considera que debe seguir siendo el líder del equipo junto al ahora lesionado Mike Conley, o bien porque podría constituir su mejor activo en un eventual traspaso. Marc es un bastión para los Grizzlies, que apostaron fuerte por él cuando, en 2015, renovaron su contrato por cinco años y un total de 110 millones de dólares.

Marc es el líder del equipo, también en las estadísticas ya que es el mejor en puntos (19,1), rebotes (9,1), asistencias (4,1 empatado con Conley) y tapones (1,7). Tras la octava derrota seguida del equipo (12º en el Oeste con siete triunfos y 12 derrotas) y ser relegado al banquillo, Marc explotó: “Ha sido la primera vez, y no me ha gustado nada. Estoy más tocado y frustrado de lo que puedo enseñar. Odio no jugar. Si no estoy ahí fuera, es que no soy valorado. Estoy seguro de que el cuerpo técnico sabía que eso era lo que más me iba a doler”. Pocas horas después, Fizdale dejó de ser su entrenador.