Nolito y Navas impulsan a un tierno Sevilla
Los de Berizzo encarrilan su pase a la Champions ante el Basaksehir
No fue tan fácil como dictó el marcador, pero el Sevilla dio un paso importante para meterse en la fase de grupos de la Champions League al derrotar al Basaksehir en una noche de perros en Estambul. Una delicia de Ben Yedder y la amplitud de su plantilla, traducida en la aportación de Navas y Nolito, acabaron por doblegar al Basaksehir, un equipo con oficio, que mostró más pujanza física en un partido marcado por la fuerte lluvia.
El Sevilla alternó momentos de juego excelente, como en la primera mitad, con fases de duda, donde fue superado por la intensidad del conjunto turco. Fue un equipo bonito, de excelente toque, pero muy tierno en defensa, incapaz de imponerse en los múltiples duelos que tuvo el encuentro. Ocurre, sin embargo, que el plantel andaluz cuenta con un número importante de jugadores de calidad. Navas y Nolito salieron en la segunda mitad para aupar a un equipo que había perdido el control, antes mantenido por Banega y N'Zonzi. El Basaksehir empató y la cosa se puso complicada. Hasta que Berizzo dio entrada a Nolito y a Navas, quien en su primera acción dio un pase de gol a Ben Yedder. El francés anotó con un prodigioso remate de tacón. Habrá que preguntarse por qué el nuevo entrenador del Sevilla le dio la titularidad a Montoya por delante de estos dos elementos. El extremo argentino pone mucha voluntad, pero no está a la altura de este gran Sevilla.
El portero Rico, recién renovado, también tuvo su cuota de responsabilidad en el triunfo del Sevilla. Hizo paradas de mérito ante un rival que mostró peligro y todavía salvó la victoria con una mano magnífica en el alargue a remate de Napoleoni. En la vuelta, el próximo martes, el Sevilla debe certificar el pase a la fase de grupos de la Liga de Campeones. En Sevilla lloverá menos, en todos los sentidos.
Bajo la batuta de un excelente Banega, ayudado por Pizarro y N'Zonzi, el Sevilla se sobrepuso a un inicio titubeante. Diluvió sobre Estambul y también sobre la inestable zaga del conjunto andaluz, quizás la línea que necesita más ajustes en el equipo que diseña Berizzo. Por ejemplo, Mercado sufrió mucho ante Elia. El Basaksehir, un equipo sin tradición pero con cierta calidad, pudo marcar a los dos minutos en un despiste de la zaga, con disparo de Mossoró fuera con todo a favor. Toque a toque, paso a paso, el equipo andaluz fue cimentando su dominio gracias a la incuestionable superioridad de su triángulo en el centro del campo. La mejoría en el juego vino acompañada por la pegada, una virtud esencial en la élite. Correa habilitó a Escudero, que entrando desde atrás le pegó con el alma para que el balón entrara como un cohete en la portería turca. Una preciosidad de gol que le sentó mal al Basaksehir, que se quedó sin balón y sufrió una barbaridad.
Fueron los momentos en los que el Sevilla pudo sentenciar la eliminatoria. Banega gozó de tres ocasiones seguidas. No contento con su aportación en ataque, puso de gol a Correa. El meta Babacan volvió a salvar a los turcos. Tampoco Ben Yedder llegó a un pase de Montoya. A medida que la lluvia remitía se agigantaba el poderío de un Sevilla de clase, asentado en el toque de una medular de jerarquía
Despiste y empate
Banega se cansó y el Basaksehir, fuerte en el aspecto físico, mejoró mucho en el tramo inicial de la segunda parte. Tanto, que puso en muchos aprietos a un Sevilla acorralado, hasta el punto de que llegó el empate por mediación de Elia. Berizzo, que tiene un talante conservador, reaccionó. Nolito y Navas le cambiaron la cara a este Sevilla tierno y bonito, que debe mejorar mucho en el aspecto defensivo para codearse con los mejores. En Turquía ganó gracias a la calidad. Necesita más contundencia y que jugadores como Kjaer, Nolito y Navas adquieran su mejor versión en el aspecto físico.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.