Rossi abre su casa y su vida a las cámaras

Valentino Rossi no sólo lleva 20 años compitiendo, sino que casi siempre lo ha hecho al máximo nivel. Ha tenido años mejores que otros, pero siempre ha logrado sobreponerse. A las malas temporadas. Y a las malas decisiones. Ha superado sus dudas. Y ha demostrado ser el más astuto en la pista y en el paddock. Su inconfundible amarillo, su carisma, sus peripecias y hasta sus maniobras, muchas veces en la línea de lo permisible, mueven a las masas. Pero, pregunta su principal patrocinador, Monster Energy, a sus aficionados: “¿Le conoces, realmente?”. Así que se han propuesto ayudarles. Metiéndose en su casa. Y en su vida.

El proyecto consiste en una serie documental en la que además de echar un vistazo a lo conseguido: sus mejores gestas, carreras, adelantamientos o celebraciones, las cámaras aterricen en Tavullia, residencia de Rossi, donde pasa la mayor parte del tiempo. Siempre que no está compitiendo está allí: entrenándose, trabajando, ideando, con sus amigos, con su gente. Y ahí quiere mostrar Monster cómo es el Valentino que no se ve habitualmente.

Apenas serán cinco capítulos. Y el primero, el que se estrenó este jueves, coincidiendo con el inicio del gran premio de Francia, apenas semana y media después de que el piloto italiano ofreciera una auténtica exhibición en Jerez, ya se puede ver cuando uno quiera, como y donde quiera, siempre que tenga conexión a internet. La duración de este primer episodio es de poco más de nueve minutos. Y es una mera introducción del personaje y de lo que vendrá, de lo que esta especie de serie documental en pequeño formato aspira a ofrecer al espectador. El punto culminante, además, del volumen ingente de material inédito, gracias al acceso que Rossi les ha garantizado a su intimidad, en casa, en el Ranch o las dependencias de su empresa, VR46, llegará con el GP de Italia, que las cámaras, anuncia Monster, documentarán para luego poder dar buena cuenta de ello en uno de los últimos capítulos. El quinto se emitirá en 25 de julio.

Además del propio Rossi, participan voces tan autorizadas para explicar quién es el protagonista como su propio padre, también piloto, Graziano Rossi. O su amigo, ex compañero en Yamaha y ya piloto retirado Colin Edwards. El consejero delegado de Dorna, Carmelo Ezpeleta, su mejor amigo, Uccio Saluzzi, su representante Aldo Tebaldi, o el director de Yamaha Motor Racing, Lin Jarvis, que asegura: “Trabajar con Valentino siempre es interesante”. Él fue el que no dudo este pasado mes de marzo en ofrecerle la renovación de su contrato, aunque no la hubiera pedido. Y Rossi dudó en firmar. “Pilotar para mí es una cuestión de divertirse en moto, y todavía disfruto la experiencia tanto como lo hacía al principio. Esta temporada, por aquello de llevar 20 años he recordado muchos buenos momentos, pero espero que todavía queden muchos más por llegar”, apunta él.

El primer episodio se llama The Greatest Of All Time (el mejor de todos los tiempos, en inglés). Los nueve minutos que dura explican por qué. Y la última carrera que brindó en Jerez, a sus 37 años, también.