Platini pasa al ataque tras la condena

La espantada del viernes pasado ante la Comisión de Ética de la FIFA no le sirvió para nada a Michel Platini. El organismo internacional lo inhabilitó durante ocho años para realizar cualquier actividad relacionada con el fútbol por un pago injustificado de la FIFA de 1,8 millones en 2011. La respuesta del exjugador francés fue lacónica. Un escueto comunicado hecho público por sus abogados y en el que calificaba el proceso de “mascarada”.

El aparente silencio del presidente sancionado de la UEFA solo duró un día. Explicó ayer en una entrevista a la agencia France Presse que poco le importa todo lo que ha ocurrido porque “el partido de verdad comienza ahora en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS)”. Platini tiene la intención de recurrir el fallo ante la justicia deportiva, pero, tal y como aseguró, todavía no ha podido porque la FIFA no le ha notificado ni a él ni a sus letrados los motivos de la sanción.

Platini, de 60 años, arremetió duramente contra la Comisión que lo ha juzgado. Sin ahorrar un solo calificativo, tildó al organismo de “patético” y prometió llegar hasta donde sea necesario para limpiar su imagen. “Yo lucharé contra esta injusticia de tribunal en tribunal, incluidos los ordinarios”.

Lo que más sorprende al triple ganador del Balón de Oro es la actitud de la FIFA en los últimos cuatro años. “¿Qué ha hecho la Comisión entre 2011, cuando recibo el pago, y 2015, que es cuando me han sancionado? ¿Dormía y de repente se ha despertado?”, se preguntó.

Un aliado inesperado que se significó a favor del dirigente del fútbol europeo fue el ministro de Deportes francés, Patrick Kanner. El político cuestionó públicamente la legitimidad de la Comisión de Ética y señaló que Platini no había podido defenderse en condiciones justas. “Lamento la decisión porque creo que está siendo perseguido”.

En defensa del exfutbolista galo salió también su compañero en la Juventus Zbigniew Boniek, con quien compartió vestuario en los ochenta. El ahora presidente de la Federación polaca de fútbol entiende que el castigo de ocho años es casi como una sanción vitalicia —pena en principio prevista según lo que se filtró el 24 de noviembre—. “No comprendo por qué lo han condenado”, subrayó Boniek.

Si el castigo no ha sido mayor, tal y como se presuponía, es porque la Comisión de Ética, presidida por el alemán Hans Joachim Eckert, no pudo probar la existencia de corrupción en el pago de 1,8 millones; solo cobros desleales y conflicto de intereses. “¡Faltaría más! De todas formas, parto del principio de que la verdad terminará saliendo y que se reconocerá mi inocencia”, reiteró el exfutbolista galo.

El apartamento de Blatter

El otro nombre propio implicado en el caso es el de Joseph Blatter, excluido también del mundo del fútbol por ocho años. A pesar de esta sentencia, podrá seguir disfrutando de las ventajas de ser presidente de un organismo con sede en Zúrich (Suiza), como vivir en un apartamento pagado o tener un chófer de la organización. De acuerdo con la legislación helvética, su contrato laboral le blinda este tipo de prerrogativas hasta que tenga un sucesor. Lo único que perderá es su acceso al teléfono móvil o al correo electrónico.

Como trasfondo de este castigo aparecen las elecciones a la presidencia de la FIFA. El recambio de Sepp Blatter está fijado para el próximo 26 de febrero y Platini pretendía concurrir como candidato —la Comisión Electoral rechazó su nombre al estar implicado en una investigación interna—. Con ocho años de inhabilitación, los plazos para el dirigente francés son una quimera; y su sueño de sentarse en el sillón del máximo organismo del fútbol roza la imposibilidad. “Creo que este es el final para Blatter y Platini”, concluyó el presidente de la Federación Inglesa, Greg Dyke.