Los Wolves de Ricky Rubio claudican en Memphis

La temporada se les acaba a Ricky Rubio y a sus Wolves. Las escasas posibilidades que les quedaban son ahora ya remotas tras perder en Memphis (109-92). Fue la tercera derrota consecutiva de Minnesota, que se descuelga del grupo de equipos que pelean metidos en un puño por no perder el tren de los playoffs. A los Wolves, décimos en el Oeste, les separan ya ocho victorias del trío formado por Memphis, Phoenix y Dallas, empatados, con 42 triunfos cada uno, aunque los Grizzlies con una derrota menos.

Los Grizzlies dominaron el partido por completo. Conley se mostró muy superior a Ricky. El base de Memphis sumó 23 puntos y 6 asistencias, mientras que el español volvió a sufrir debido a su falta de puntería, con una sola canasta en sus ocho tiros de campo. El de El Masnou acabó con 6 puntos y 4 asistencias. Los Wolves notan muchísimo la baja de Pekovic y también la de su sustituto natural, el francés Turiaf. En Memphis se añadió la de Barea. Kevin Love fue el máximo anotador de Minnesota, pero se quedó en 16 puntos, con muy mal porcentaje de tiro.

Marc Gasol empezó con un 0 de 6 en sus lanzamientos, pero mejoró a medida que avanzaba el partido y concluyó con 14 puntos, 12 rebotes y 3 asistencias. Randolph aportó 17 puntos y los Grizzlies sumaron 12 rebotes más que sus rivales, a pesar de que su pívot novato, el senegalés Gorgui Dieng, capturó 17. Los Grizzlies obtuvieron también buenas aportaciones ofensivas también de Prince, Miller y Ed Davis.

Oklahoma resolvió de un plumazo su duelo ante Denver (117-96). A pesar de las bajas de Westbrook, Sefolosha y Perkins, los Thunder marcaron diferencias abismales en el primer cuarto (41-24) y mantuvieron una velocidad de crucero alta que les permitió mantener a raya a los Nuggets y dosificar a sus mejores jugadores. Fue el caso de Durant, que tuvo bastante con 31 minutos para sumar 27 puntos y 8 asistencias, y de Ibaka, que aportó 15 puntos, 7 rebotes y 3 tapones en 32 minutos.

Miami frenó su nefasta racha a duras penas. Le costó un mundo doblegar a Portland (93-91). Lo consiguió gracias a una canasta de LeBron James a falta de 11 segundos, seguida de un tapón de Bosh a Lillard en la última jugada del partido.

Los campeones de las dos últimas temporadas sumaban siete derrotas en sus últimos 11 partidos. Y perdían de esta forma la posibilidad de acercarse en la clasificación a Indiana, líder de la Conferencia Este. Pero con su triunfo, se acercan gracias a que los Pacers también se encuentran en plena crisis, con una racha muy similar a la de los Heat: siete derrotas en sus últimos 12 partidos. Confirmaron su nefasta racha en Chicago donde perdieron (89-77), con un nefasto rendimiento de Hibbert, West y todo su banquillo.

“Nuestro vestuario está enojado”, declaró antes del partido el entrenador de los Heat, Erik Spoelstra. “No estamos acostumbrados a jugar de esta manera, sobre todo en defensa”. Seis de los últimos adversarios de Miami consiguieron porcentajes de acierto en el tiro superiores al 50%.”Es inaceptable”, dijo Bosh. “Tenemos que enderezar el rumbo. Si no lo hacemos, veremos el campeonato desde casa”.

A pesar de que los Blazers jugaron sin Aldridge, lesionado, y de que se quedaron en un 38% de acierto en el tiro, los Heat pasaron muchas dificultades. LeBron James sumó 32 puntos, Bosh añadió 15 y Andersen, 13. Pero el resto del equipo, incluidos Ray Allen y Battier, que no atraviesan por un buen momento de forma, apenas aportó. También fue discreta la actuación de Oden, que se enfrentó a su antiguo equipo y anotó 4 puntos y capturó 3 rebotes en 15 minutos.

Los Blazers acusaron sus malos porcentajes y por eso los 19 puntos de Lillard, los 17 de Mo Williams o los 15 de Matthews no fueron suficientes. Batum se quedó en 11. Víctor Claver volvió a quedarse sin jugar un solo minuto. Los Blazers han caído en picado, especialmente desde que se lesionó Aldridge, y ya suman siete derrota en sus últimos diez partidos.