El regreso de Miguel
El jugador del Valencia recupera la titularidad tras dos partidos de castigo, pero le falta ritmo
El entrenador del Valencia, Unai Emery, levantó ayer el castigo a Miguel. Lo había enviado a la grada las últimas dos ocasiones en que confeccionó una lista de convocados, para las más recientes jornadas de Liga. El lateral derecho portugués llegó tarde al entrenamiento del viernes previo al partido contra Osasuna. Ya era la segunda vez que se retrasaba este curso. Y una de las tantas muestras de indisciplina de un jugador con un prodigioso físico, pero que en los últimos años ha atravesado problemas personales que han tenido sus consecuencias en el desarrollo de su profesión. Ayer, con Mathieu sancionado para el partido de la Liga Europa, el técnico echó mano del internacional portugués.
Y éste demostró sobre el campo por qué un jugador de 29 años que hace tan sólo tres temporadas jugaba en Segunda, el también lateral derecho Bruno Saltor, le lleva la delantera. Miguel ya no es indispensable. No lo es porque su estado físico se lo impide. Ha perdido velocidad y potencia porque no se cuida lo suficiente. Mestalla lo comprobó ayer a los 41 minutos de juego: Gervinho, que buscaba constantemente aproximarse a Moyà por la banda izquierda, la defendida por Miguel, se quedaba solo en el área: Miguel, que llegó tarde y mal, a trompicones, le dio una patada por detrás y lo derribó. El árbitro no vio nada. Pero el penalti existió.
Como Gervinho, también Frau y el medio Hazard aguardaban el error de Miguel, la presa más fácil en la defensa valencianista. Y, aunque hasta esa jugada que no fue sancionada por el árbitro, para suerte de los de Mestalla, el lateral no desentonó, tampoco estuvo especialmente brillante. En cambio, colaboró bastante en las jugadas de ataque por la banda derecha, con repetidas combinaciones con Joaquín, triangulaciones en las que también participó Banega, y algún centro. Miguel fue entonándose, de menos a más.
Además de Miguel, también regresaron jugadores como Alexis o Maduro, relegados a la suplencia este curso, y cuya entrada en juego permitió dar descanso a futbolistas con muchos minutos a sus espaldas ya como Dealbert y Albelda. Ambos cuajaron un partido correcto. Además, regresó al equipo el mediocentro portugués Fernandes, que no había jugado desde que se lesionara el pasado mes de abril y se perdiera la temporada por una fractura de peroné. Apenas disputó unos minutos.
Con este resultado, el Valencia aún no está clasificado para los dieciseisavos de final de la Liga Europa. Se jugará su pase a las fases eliminatorias contra el Genoa en Italia. Con un empate le bastaría. Aunque le valdrían otras carambolas si perdiera por la mínima ese último encuentro. Joaquín, autor de dos de los goles de su equipo declaró tras el partido estar contento por haberse reencontrado con el gol. "Se ha demostrado que en este equipo cualquiera que entre lo puede hacer bien", afirmó.
Una fina lluvia empapó a muchos aficionados, que un cuarto de hora antes del final del partido empezaron a abandonar Mestalla, un estadio menos desangelado que en los anteriores partidos de la competición.
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