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Crece el misterio de Leonardo da Vinci: una copia del ‘Salvator Mundi’ cuesta un millón de euros

La obra, bastante dañada, está atribuida a “la escuela italiana” con fecha “alrededor de 1600″, posterior al artista. Varios expertos consultados difieren sobre la calidad de la pieza

La parte delantera y trasera de la copia del 'Salvator Mundi' subastada por Christie`s, en noviembre, sin atribución.
La parte delantera y trasera de la copia del 'Salvator Mundi' subastada por Christie`s, en noviembre, sin atribución.Christie's
Ana Marcos

Una copia bastante dañada del Salvator Mundi, de Leonardo da Vinci (1452-1519), fue vendida por más de un millón de euros en una subasta online en Christie’s el pasado 28 de noviembre. Su precio estimado estaba entre 10.000 y 15.000 euros. La obra está atribuida a “la escuela italiana” y con fecha “alrededor de 1600″. En la ficha de la casa de subastas se especifica que la pieza, sin marco, es posterior al artista renacentista. Una serie de características que, a priori, parecen más disuasorias que atractivas. Pero, tras 11 días expuesta en la web de Christie´s, el último día se produjo una batalla entre unos pocos comerciantes. En minutos, las ofertas fueron escalando y el precio se disparó hasta más de un millón de euros. ¿Qué pasó? ¿Por qué una copia posterior a Leonardo da Vinci llegó hasta esa cantidad? Una vez más, como todo lo que rodea al pintor y a este cuadro, hay más misterios que certezas.

Primero, los datos comprobables. En el informe sobre el estado del cuadro que cualquiera puede descargar en la web de Christie´s aparece que es una pieza de 63,2 centímetros por 51, pintada en un panel de madera de álamo, un material endeble, fácilmente deformable, que, sin embargo, según este documento, es estable porque ha sido reparado. Bernard Deprez, el restaurador independiente que firma el estudio, explica que, tras un análisis “a la luz del día” y otro con rayos X, se puede concluir que hay “numerosas pequeñas pérdidas” en el traje rojo de Cristo, en la barba, bajo la cabeza, en el fondo del cuadro y en la bola de cristal en la mano del personaje.

El cuadro del 'Salvator Mundi' subastado en Christie´s, en noviembre.
El cuadro del 'Salvator Mundi' subastado en Christie´s, en noviembre. Christie's

Todos estos desperfectos son perceptibles en la foto que se incluye en la ficha del lote. No hace falta ser un experto para verlos. Aun así, Deprez concluye en su informe que “como las partes más importantes del cuadro no han sido alteradas, el estado de conservación de la pintura puede considerarse muy bueno”. Lo que no aparece en el documento de este Salvator Mundi es un análisis de los pigmentos.

En cuanto a la fecha del cuadro indicada por Christie’s, si es la correcta, alrededor de 1600, no puede ser una obra de Leonardo da Vinci y, probablemente, no saliera de su taller. Sin embargo, según el catálogo de la gran exposición que hubo en el Museo del Louvre en París en 2019 dedicada al autor, existen hasta 22 copias del Salvator Mundi. Esta que ha aparecido ahora podría ser una de ellas. “Podría ser muy importante porque la manga del brazo derecho está pintada exactamente igual que en un dibujo de Leonardo”, explica Frank Zöllner, el historiador del arte responsable de mantener actualizado el catálogo razonado del artista. “Hay otro Salvator Mundi con esa manga, una pieza perdida, pero de la que se sabe su existencia por fotos. Estuvo en la colección Yarborough, luego conocida como la colección Worsley”, continúa Zöllner, que se limita a este par de comentarios al no contar con la información necesaria para hacer más conclusiones. En la ficha de Christie´s aparece que el cuadro a la venta pertenecía a una familia del sur de Francia.

La parte posterior de la copia del 'Salvator Mundi' donde se aprecian las restauraciones.
La parte posterior de la copia del 'Salvator Mundi' donde se aprecian las restauraciones.Christie's

Los expertos

Una vez revisados los datos técnicos, empiezan las preguntas sobre cómo es posible que solo esta pieza supusiera la mitad del total de la venta de todas las obras de la subasta. El Salvator Mundi se vendió por 1.062.000 euros, todos los lotes por 2.722.428 euros. Desde Christie´s Francia defienden que se trata de una pieza de calidad, de un autor muy demandado por el mercado del arte. “Leonardo da Vinci es una figura fascinante para muchos, incluso si se trata de copias tardías como esta”, explican en la casa de subastas. “El fenómeno sigue creciendo”, apuntillan, y ponen como ejemplo la venta de dos copias de la Mona Lisa. Una, firmada por Raymond Hekking, se vendió en junio de 2021 por casi tres millones de euros, “10 veces más que su precio estimado”. La otra, atribuida a Théodore Chassériau, superó los 160.000 euros, cuando partía de un precio entre 50.000 y 70.000 euros.

Un coleccionista experto en los maestros antiguos que prefiere no dar su nombre (es este un mundo lleno de secretos y opacidades) corrobora, hasta cierto punto, la versión de Christie´s. “Son locuras. Estos cuadros se convierten en iconos y la gente quiere tener copias de época. De alguna forma ya se hacía en el siglo XVII cuando los grandes coleccionistas encargaban copias de cuadros importantes a pintores de primera fila”, relata el experto, que es tajante al afirmar que “no es un buen cuadro”. Y añade: “Es un documento que indica que el cuadro original es importante porque ya en la época se copiaba”.

Si no es un buen cuadro, como asegura el coleccionista, ¿el precio final es pura especulación? Otro experto consultado por EL PAÍS difiere y al otro lado del teléfono suena casi más rotundo: “El cuadro es magnífico y eso que solo he visto una foto en un móvil”. En su opinión, hay menos margen para especular con una obra de arte antiguo que con una contemporánea. Aunque la venta récord por más de 300 millones de euros del Salvator Mundi, en una subasta también en Christie´s en 2017, denota que sí existe interés por los maestros antiguos en un mercado del arte donde manda la ingeniería fiscal, perfectamente legal, que no solo permite que los compradores permanezcan en el anonimato, sino que además les garantiza ciertos beneficios fiscales.

“Creo que el precio se debe a que han encontrado la atribución”, continúa el coleccionista convencido de que es una buena obra. “Es probable que sea un seguidor muy importante de Leonardo”. Los errores de atribución suelen ser bastante habituales en este tipo de ventas. Varios expertos consultados coinciden en que las grandes casas de subastas en ocasiones “carecen del expertise necesario” para adjudicar y fechar correctamente las obras al trabajar con gran cantidad de piezas. Por el contrario, estos mismos expertos defienden que cuentan con los conocimientos y la experiencia para “ver lo que otros no ven”. Es decir, aseguran que con tiempo y el dinero necesario para contratar a buenos restauradores son capaces de identificar sleepers (durmientes): obras mal atribuidas, con un precio de salida irrisorio, y aún sin protección legal.

“Lo restaurarán, le pondrán la atribución y como todo lo que gira alrededor de Leonardo está de moda, le sacarán mucho dinero”, dice el experto convencido de que se trata de una gran pieza. ¿Cuánto dinero? “Calculo entre cuatro y cinco millones”, opina. El otro coleccionista más escéptico coincide en que en el mercado asiático, los compradores ávidos de iconos, no tendrán problema en pagar esa cantidad. Porque como dicen en el documental El misterio del Salvador Mundi (2021): “El mundo del arte está lleno de gente que quiere ganar mucho dinero a costa de los ricos”.

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Sobre la firma

Ana Marcos
Redactora de Cultura. Forma parte del equipo de investigación de abusos en el cine. Ha sido corresponsal en Colombia y ha seguido los pasos de Unidas Podemos en la sección de Nacional, además de participar en la fundación de Verne. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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