El Palau contará con una nueva sala de ensayos en una finca modernista cercana

El Palau de la Música expande su actividad más allá del emblemático edificio modernista que ocupa en el centro de Barcelona. El nuevo Espai Palau, ubicado en la calle Ortigosa, albergará ensayos y otras actividades que no se pueden llevar a cabo en las instalaciones originales. “El Palau es una joya arquitectónica, pero con una evidente limitación de espacio”, afirma el director general del Palau Joan Oller, un problema que se va a solucionar con esta anexión, que se suma a las dos anteriores. El acuerdo de alquiler con los propietarios se ha establecido para 25 años con opción a una posible prórroga y tendrá un coste de 12.000 euros mensuales.

El edificio se ha escogido por la proximidad con las instalaciones principales y con el objetivo de reforzar la identidad del Palau, ya que la reciente anexión también se construyó en la década de 1910 y preserva el estilo modernista. Se trata de los antiguos almacenes Serra i Balet, una nave industrial diseñada por el arquitecto Josep Graner Prat que se usó para actividades de la industria textil y que está catalogada en el patrimonio cultural de la ciudad.

Pese a la necesidad de insonorizar las salas que dividen el espacio interior de la nave, el director general apunta que “es un espacio muy polivalente que permitirá celebrar actos y conciertos en formato reducido, conferencias, talleres e incluso reuniones para empresas”. En este momento, las instalaciones acogen la segunda edición del esplai artístic, una propuesta organizada por el proyecto social Palau Vincles.

Además de la organización de eventos, el Palau quiere rentabilizar el espacio mediante la posibilidad de alquilar a personas o empresas externas las 13 aulas, el espacio polivalente y el área de descanso que conforman la nave, siempre que el Palau no requiera disponer de estas.

Acabada la temporada, se aprovecharán este mes de agosto y septiembre para realizar tareas de mantenimiento y limpieza en la sala de conciertos, aunque el Cafè Palau continuará abierto. Las mejoras del espacio incluyen la revisión del techo para recuperar el color original en su totalidad, la limpieza del órgano, el tapizado selectivo de las butacas que lo requieran, la mejora de la gradería móvil para tener una mayor flexibilidad de composiciones en escena, y la sustitución de la iluminación actual por la tecnología LED. El coste asciende a un millón de euros para el mantenimiento y de 600.000 para el cambio del sistema de alumbrado, una cantidad que se cubrirá a medias entre los recursos financieros propios y los Fondos Europeos de Desarrollo Regional.

La presidenta de la Fundació Orfeó Català-Palau de la Música Mariona Carulla ha cerrado la temporada agradeciendo los esfuerzos de músicos, miembros del coro, público y patrocinadores por haber “contribuido a mantener viva la llama de la cultura durante los meses de pandemia”. La actividad en la sala se retomará el 20 de septiembre con un concierto de la mezzosoprano Joyce Didonato, que inaugurará la nueva temporada.

Gratuito y digital, la apuesta del Palau para internacionalizar su programa artístico

El proyecto Palau Digital que nació en enero de 2019 continúa siendo una de las propuestas de la fundación para dar a conocer la programación artística propia, tanto a nivel nacional como internacional. “La experiencia de la música en directo no se puede sustituir, pero el audiovisual puede ofrecer otras características que, además de la variación de formatos, nos permite llegar a más audiencia”, aseguran desde el departamento de comunicación.

De momento, Palau Digital continúa formando parte de la página principal del Palau, pero la apuesta por el proyecto pasa por la creación de una plataforma propia dedicada exclusivamente a la digitalización de contenidos. Una herramienta que se puede permitir el lujo de ser gratuita “gracias a la implicación de los inversores”. La retransmisión de conciertos en streaming es una tarea que se está llevando a cabo en colaboración con otras entidades culturales europeas, lo que permite una mayor capacidad de incisión más allá de las propias fronteras.