Muere el actor Manuel Gallardo a los 85 años
El intérprete, conocido por series como 'Verano azul', estaba considerado como un"hidalgo" del teatro español
El actor Manuel Gallardo ha fallecido este viernes a los 85 años en Madrid, según informó la Unión de Actores y Actrices en su cuenta de Twitter. Como “un verdadero hidalgo”, así recuerdan amigos y compañeros a Gallardo (Córdoba, 1935). Sobre su nombre pesa todavía la fama tras haber interpretado al más estricto de los padres de uno de los protagonistas, Javi, de la serie Verano azul (1981), pero en su currículo cuenta con interpretaciones de personajes variopintos en más de cien obras teatrales, unas de 40 películas -dentro y fuera de España- y decenas de programas para la televisión.
Hoy lamentamos la pérdida de nuestro buen compañero Manuel Gallardo. Desde la @uniondeactores queremos transmitir nuestro más sincero pésame a sus familiares y amigos. #DEP pic.twitter.com/8Gcrwhzb1Q
— Unión de Actores y Actrices (@uniondeactores) August 21, 2020
Gallardo perteneció a una estirpe de actores que viajaron por pueblos y ciudades montando espectáculos que ellos mismos producían y actuaban. En sus potentes personalidad y presencia eran visibles las características que él mismo relataba sobre su abuelo Isidro Lechet, una especie de caballero andante que recorrió la España de la preguerra dando funciones en las que los actores podrían interpretar hasta dos o tres personajes en escena. El actor presumía de haber debutado en una de esas ocasiones cuando tenía apenas 15 días y rompió a llorar en el escenario en brazos de su madre. Y la saga familiar prosigue con su hija Nuria.
A Gallardo le recuerdan por su voz colosal y su rotunda pasión por el teatro y el verso clásico. Iñaki Guevara, amigo y compañero de Gallardo, y actual secretario general de la Unión de Actores y Actrices, también señala su habitual pañuelo en el cuello: “si lo podía sacar en la función, porque era oportuno, lo hacía”, dice. Además, Guevara cuenta con especial admiración: “Era un hombre que lo daba todo por sus compañeros, un luchador por la dignidad de la profesión”. El cordobés fue uno de los miembros fundadores de la Academia de las Artes Escénicas de España y también secretario general de la Unión de Actores.
Para Guevara, la muerte de Gallardo es un golpe duro: “Él era de una pulcritud y una dignidad moral muy fuerte. Un hombre comprometido, una persona amorosa y querida. Alguien que nos entronca con los actores más clásicos, esos que nos están dejando solos cada año”. Y en eso coincide con el director de cine Víctor Matellano, quien trabajó con el actor en el espectáculo Privilegio de Villazgo, donde también aparecían Conrado San Martín, César Vea y Saturnino García. “La generación de Manuel es la de un tipo de profesionales que se está perdiendo. Se están yendo todos estos clásicos”, cuenta el director.
Sin embargo, una de las cosas que más le atraían a Matellano de la trayectoria del actor eran las películas en las que había participado: “Con él hablé muchas veces de cine porque me interesaba su trabajo en cosas en las que interpretaba casi todo lo contrario de lo que encarnaba en teatro”, y recuerda aquella producción hispanoitaliana de una especie de E. T. “a la española” en Hermano del espacio (1988), en la que Gallardo interpretó a un sheriff. Para Matellano, Gallardo era una especie de “hidalgo” que desprendía su pasión por el teatro “puro y duro” y, junto con Guevara, rememora el deseo que le invadía de crear un diccionario de voces sobre el léxico clásico del teatro. El director insiste: “Nos delega solidez y rigor; el amor por el trabajo bien hecho, por un trabajo de calidad. Y la seriedad. Él era un señor muy divertido pero al mismo tiempo muy serio”.
Gallardo estuvo varias temporadas en la compañía Lope de Vega, de Tamayo, y también formó la suya propia durante algunos años. También fue de los pioneros en las novelas y espacios dramáticos de Televisión Española. Entre los filmes más conocidos en los que apareció destacan La casa del lago, Soraya reina del desierto, El bruto, el listo y el capitán, Los cien caballeros, La última señora Anderson, Sábado, domingo y viernes o Las cosas del querer.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.