Referente del cooperativismo agrario andaluz y mecenas cultural

Decano del sistema financiero español, referente destacado del cooperativismo agrario andaluz, un exitoso emprendedor agrícola y ganadero comprometido con las asociaciones empresariales, presidente de la Caja Rural del Sur hasta 2017, senador por UCD en los primeros años de la transición, polifacético mecenas cultural, promotor de monumentos, ganadero de reses bravas…

Ese podría un retrato a vuelapluma de José Luis García-Palacios (Huelva, 1936), fallecido este martes en Córdoba mientras pronunciaba un discurso en el rectorado de la Universidad con motivo de la entrega de los premios a los mejores expedientes académicos, instituidos por la Fundación de la Caja Rural del Sur, de la que era presidente. García-Palacios se sintió indispuesto mientras hablaba, “perdonad un segundo” dijo al auditorio antes de desvanecerse, y, 25 minutos después, los servicios médicos de urgencia solo pudieron certificar su fallecimiento tras aplicarle unas maniobras de reanimación que resultaron infructuosas.

La sociedad andaluza echará de menos a José Luis García-Palacios, un ejemplo de bonhomía y afabilidad, quien a sus 82 años mantenía una intensa actividad institucional y gozaba de un merecido prestigio labrado a lo largo de una toda una vida profesional dedicada a la transformación del sector agrario andaluz.

Onubense de pura cepa, era hijo único de una familia de empresarios palentinos con intereses en la industria del cuero, pieles y lanas que se instaló en el sur en la búsqueda de parajes más propicios para su actividad. Pronto destacó el heredero como emprendedor, y tras finalizar sus estudios de Ingeniero Técnico Agrícola se dedicó por completo a la explotación familiar que diversificó después en una empresa agropecuaria de secano y regadío, ganado bovino, ovino y porcino, la cría de bogavantes de agua dulce y el cultivo de arándanos y caquis.

Simultaneó su dedicación empresarial con el compromiso social y político. Se inició, primero, en el cooperativismo agrícola. Fue presidente de la Hermandad de Labradores y Ganaderos y de la Cámara Agraria de su ciudad. En 1972 accedió a la máxima responsabilidad de la Caja Rural de Huelva, y continuó como presidente tras la fusión de esta con la de Sevilla bajo la denominación de Caja Rural de Sur. Entretanto, fue cofundador de la UCD de su ciudad natal, y senador por la provincia en las dos primeras legislaturas de la democracia.

Ejerció, además, como primer presidente de la Federación de Cajas Rurales Andaluzas y del Grupo Ibérico de Crédito hasta que en mayo de pasado año le sucedió su hijo mayor en la presidencia de la Caja Rural del Sur y él se dedicó de lleno a la fundación de la entidad.

No olvidó tampoco su vertiente social. Fue presidente de la Asociación de la Lucha contra el Cáncer de Huelva, académico de Ciencias, Artes y Letras de su provincia, y miembro de la Academia de Ciencias Sociales y del Medio Ambiente de Andalucía. También destacó como mecenas cultural y activista solidario, y puso la Fundación de la Caja Rural al servicio de múltiples iniciativas ciudadanas.

Gran aficionado a los toros, promovió el monumento al torero Pepe Luis Vázquez, erigido frente a la plaza de La Maestranza, era ganadero de reses bravas del hierro de Albarreal e instituyó los premios taurinos ‘Pepe Luis Vázquez’ que premian la mejor labor de cada temporada en Andalucía.

José Luis García-Palacios, casado y padre de cuatro hijos, amante de la jardinería y los helados, murió en el ejercicio de una de sus costumbres más queridas. Era un orador ocurrente y simpático, y se lanzaba al ruedo sin papeles y sin más muleta que su gracejo y su experiencia, con los que siempre despertaba la simpatía de los demás.