Una muestra de Jock Sturges en Moscú, cerrada por acusaciones de “pornografía infantil”
Particulares y cargos públicos denunciaron la exposición El responsable del centro defiende que se basan en fotos que no forman parte de 'Sin pudor'
La exposición fotográfica de Jock Sturges Sin pudor se inauguró en el Centro de Fotografía Hermanos Lumiere en Moscú el 8 de septiembre. 18 días después el centro se ha visto obligado a cerrar la muestra del artista estadounidense debido a las protestas de varios altos funcionarios y de particulares, que la tachan de "pornografía infantil".
Ayer domingo nadie pudo acceder a la exposición ya que su entrada fue bloqueada por un grupo de activistas de la ONG Los oficiales de Rusia, que asegura defender "la educación patriótica de la población". El mismo día una persona logró entrar en el edificio y vertió un recipiente lleno de orina sobre una de las fotografías.
En vísperas la senadora Elena Mizulina, conocida por sus iniciativas legislativas contra el aborto, la “propaganda de homosexualidad” y la pornografía, y la Defensora del Menor, Anna Kuznetsova, madre de seis niños y esposa de un sacerdote ortodoxo ruso, solicitaron a la Fiscalía General que investigara la exposición. El presidente de la Comisión de Seguridad de la Cámara Pública de Rusia y responsable de Los oficiales de Rusia, Antón Tsvetkov, calificó la muestra como “pura propaganda de pedofilia”.
La exposición contenía alrededor de 40 obras del estadounidense, conocido por sus imágenes de playas nudistas y de chicas jóvenes sin ropa. El proyecto retrata a 25 familias, fotografiadas durante años, y el artista asegura que cada imagen fue tomada con el consentimiento de los sujetos o de sus padres, si eran menores de edad. El director del Centro de Fotografía Hermanos Lumiere, Eduard Litvinski, comentó además que las denuncias están basadas en imágenes de Sturges publicadas por un bloguero en Internet que sin embargo no aparecen en la muestra.
"Sturges no trabaja con el cuerpo desnudo como con una forma abstracta, sino que establece un contacto especial con la persona, lo que hace sus fotos tan encantadoras y relajadas”, explican los comisarios de la exposición. De todos modos el centro decidió cerrar la muestra “para no inquietar al público”. “A menudo resulta que las personas tímidas son muy problemáticas, tienen un comportamiento muy extraño. La gente que aparece en mis fotos tal vez sea más honesta que la mayoría de sus críticos”, comentó Sturges en una entrevista al canal ruso Ren-TV.
Según Tsvetkov, una comisión compuesta por expertos en arte moderno examinará la exposición para valorar su contenido. “A menudo la obra de diferentes autores conlleva un complejo contenido cultural que puede ser motivo de confusión del público. En el arsenal de muchos artistas hay a veces obras provocativas. La evaluación de cualquier sector de actividad, incluso el arte, debe ser bien pensada, equilibrada y profesional", constata un comunicado de la Cámara Pública de Rusia.
Babelia
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