Wes Anderson y los clásicos

¿Cómo podríamos definir el cine del director Wes Anderson? ¿Son sus películas realmente comedias o nos encontramos ante melodramas irónicos y nostálgicos? Es verdad que largometrajes como Academia Rushmore; Los Tenembauns: una familia de genios o Life Aquatic invitan a la sonrisa pero también a la tristeza, algo que, a menudo, descoloca y confunde al espectador. Son títulos, en definitiva, difíciles de catalogar con personajes originales que viven situaciones sorprendentes.

Este fin de semana TCM quiere desentrañar todas las claves del cine de Wes Anderson y lo hace con uno de sus habituales cara a cara entre un autor actual y sus referentes clásicos. Y así, además de los tres títulos del director estadounidense antes mencionados, los espectadores del canal podrán ver largometrajes como Harold y Maude, de Hal Ashby; El bazar de las sorpresas, de Ernst Lubitsch y Mi tío, de Jacques Tati entre otros.

Un duelo cinematográfico que será presentado por la periodista Desirée de Fez y el director Javier Ruíz Caldera, un cineasta que ha triunfado en los últimos años con comedias como Spanish Movie, Promoción fantasma, Tres bodas de más o Anacleto: Agente secreto. Los dos confiesan su fascinación por el cine de Wes Anderson. Películas que, según Ruíz Caldera, consiguen ensamblar imagen, música y emoción logrando momentos únicos.

Wesley Wales Anderson nació en Huston, Texas, en 1969. Ya desde pequeño mostró su afición por el cine cine rodando pequeños cortometrajes en Super-8. Estudió filosofía y en la facultad conoció a Owen Wilson, quien con el tiempo se convertiría en uno de sus grandes colaboradores, tanto delante como detrás de las pantallas. Con él escribió su primer largometraje: Bottle Rocket (Ladrón que roba a otro ladrón).

Wes Anderson suele estar acompañado en sus proyectos por un grupo de actores incondicionales. Está, por supuesto, el ya mencionado Owen Wilson, pero también su hermano Luke, Bill Murray, Jason Schwartzman, Jeff Goldblum o Anjelica Huston. Con todos ellos ha formado un peculiar universo de historias, aparentemente frías pero que esconden grandes momentos de emoción y humor, combinados con situaciones sorprendentes, cuando no absurdas. Un mundo que los espectadores de TCM podrán visitar del viernes 24 al domingo 26 de junio descubriendo además sus estrechos vínculos con el mejor cine de todos los tiempos.