El cine aún se ve en televisión

Los espectadores televisivos quieren consumir cine. A pesar de Internet, a pesar de los nuevos dispositivos que permiten acercarse también a las películas, la pequeña pantalla mantiene su poder de convocatoria. Así lo demuestran cifras como las alcanzadas por la emisión de Avatar en Telecinco en noviembre del año pasado. La cadena de Mediaset lanzó una estrategia que los cinéfilos calificarán de herejía, pero que los espectadores aplaudieron: emitió el filme de James Cameron en dos partes; la primera, el 12 de noviembre, congregó a 6.059.000 televidentes y la segunda aupó aún más sus cifras llegando a 6.250.000 con un 32,2 % de cuota de pantalla (según cifras de Barlovento).

“Avatar tenía la particularidad de su duración, que permitía completar sendos prime times; aparte de ser una película espectacular de estreno en televisión que los espectadores celebraron volver a disfrutar, pero esta no es una situación convencional. Pero sí queremos, especialmente para Telecinco, programar cine enmarcado en noches-evento, y en Cuatro mantener la oferta de prime time y sobremesa, y noche de los fines de semana”, asegura Patricia Marco, directora de antena de Mediaset España. La emisión de las dos partes de Avatar marcó el récord de espectadores de la pasada temporada; fue Antena 3 quien logró la tercera mejor cifra con Piratas del Caribe: en mareas misteriosas, que congregó el 1 de enero de este año a 4.539.000 espectadores, y aún logró la cuarta y quinta películas más vistas con Torrente 4 (4.493.000 espectadores) e Invictus (4.300.000).

'Torrente 4' fue la película española con más audiencia de la pasada temporada

Y es que las grandes cadenas no renuncian a la atracción que provoca la emisión de películas. Marco defiende que Mediaset “programa el prime time atendiendo a la estacionalidad (no es lo mismo el consumo en verano o en Navidad que en el resto de la temporada), el entorno económico y sus consecuencias desde el punto de vista comercial y la estrategia de programación multicanal que venimos haciendo en los últimos años, que exige una propuesta diferenciada para cada uno de nuestros canales (cada uno con un target específico) y siempre con la vista puesta en las alternativas del resto de la oferta televisiva”.

Por su parte, Lola Molina, directora de antena de Antena 3, mantiene el cine como “un género de referencia para Atresmedia, por ello los criterios de selección para la adquisición de cine en el grupo son los de seguir siendo la ventana del mejor cine en abierto en todos nuestros canales, con El peliculón, Multicine, El taquillazo, Cinematrix, Neox y acción y en la noche de película de Nova, etcétera…”.

Entre toda la oferta disponible, los seguidores del cine español tienen un ancla en la programación de TVE: “como servicio público, TVE tiene la obligación de destinar el 6% de sus beneficios anuales a la financiación de la industria audiovisual española. El grueso de esa cantidad se destina a la financiación de cine español y el resto a animación infantil para Clan y miniseries y Tv movies para el resto de canales. Seguimos firmes en nuestro compromiso, forma parte de las obligaciones de servicio público”, asegura Gemma Sánchez, directora de programación de TVE, que destaca a TVE-1 como “la cadena que más cine español emite en horario de máxima audiencia, además de que los espectadores pueden ver todos los sábados a las 22.00 una película española, por tanto hay un equilibrio muy medido entre el cine comercial y la apuesta por el cine español”.

Lola Molina (Atresmedia): “El target comercial del cine es excelente”

Parece claro que todas las cadenas creen que se puede fidelizar al espectador ante la emisión de cine en la pequeña pantalla. “La fidelidad está en la cita con el espacio, es una labor que requiere tiempo, constancia y por supuesto contenido para luego atraer al espectador. No es una cuestión de dinero sino de equilibrio, además es un género que reporta excepcionales resultados de audiencia y es un contenido muy atractivo desde el punto de vista comercial, ya que sus resultados en target comercial son excelentes, es el más demandado por los anunciantes”, señala Lola Molina.

De modo que el cine “aún tiene un elevado poder de atracción”, defiende Gemma Sánchez, que añade: “en TVE-1 llevamos años emitiendo los domingos a las 22.00 La película de la semana y la respuesta del público demuestra que es una cita fiel que el espectador busca. Aunque los hábitos de consumo cambian y cada vez hay más posibilidades de acceso en diferentes dispositivos y plataformas, sigue teniendo sentido la emisión de cine en televisión puesto que todavía hay un amplio espectro de espectadores a los que les resulta más fácil acceder a los contenidos a través de la televisión convencional. En TVE-1, en prime time buscamos producciones dirigidas a una audiencia generalista, cine comercial para el gran público, que cuente con un reparto reconocible y que haya tenido un buen funcionamiento en su paso por salas o que destaque por haber conseguido premios internacionales. Intentamos que haya un equilibrio entre títulos de estreno y reposiciones para que el presupuesto no se dispare. En cuanto al cine que damos en La 2, buscamos un tipo de cine que no es habitual encontrar en las cadenas generalistas, cine independiente, de autor, de todas las nacionalidades, que sea exponente de la diversidad cultural”.

En cuanto a esa fidelización, Patricia Marco, no obstante, apunta: “Una programación atractiva de cine puede generar una cita bastante fiel en la parrilla y tener repercusiones positivas sobre la imagen de una cadena, pero al no tener las características personales de un programa de producción propia ayuda menos que otros formatos a forjar la identidad de un canal generalista”.

Sin embargo, las compras “por paquetes” todavía suponen un esfuerzo extra para las cadenas: “Durante varios años, antes de la fusión y la llegada de la TDT, Telecinco no renovó sus acuerdos con las majors internacionales por los altos costes de los títulos de estreno, que llevaban aparejados lotes de librería que no eran interesantes, primando editorialmente por la producción propia, que en este momento sigue copando un altísimo porcentaje de nuestra programación. En la actualidad, a raíz de la crisis económica generalizada y de las numerosas ventanas de explotación los costes se han reducido, hay más tipología de adquisiciones, incluso sobre títulos concretos, y de este modo se adecúan más al conjunto de nuestros canales. Los buenos títulos funcionan, pero a nosotros no nos interesan a cualquier precio”, defiende Patricia Marco.

Por su parte, Gemma Sánchez asegura que la compra en paquetes “es una práctica habitual tanto en televisiones públicas como privadas que permite una mejor negociación con las distribuidoras”. Quizá fuese Atresmedia quien intentase un paso más allá con la creación de la ya desaparecida laSexta 3. En palabras de Lola Molina “fue el canal de cine más visto durante todos sus años de vida y cerró en el dato anual más alto de su historia. Creo que estos datos hablan por sí solos”.

Por parte de Mediaset, además, el interés cinematográfico se acrecienta gracias a las producciones de Telecinco Cinema. “Nosotros siempre tenemos los derechos de las películas que producimos y es un importantísimo activo para Mediaset España contar con títulos de Telecinco Cinema como Ocho apellidos vascos, Lo imposible o Las aventuras de Tadeo Jones. Con ellas podremos generar una promoción especial que las convertirá en programación-evento”, promete Patricia Marco, y añade: “Ocurre en este momento que la inversión del cine puede ser más interesante si se optimiza en varios de los canales del grupo, situación que se está dando este mismo verano en Mediaset con títulos como Efectos secundarios, La niñera mágica, Medidas extraordinarias o Los Increíbles, que tienen un primer pase en Cuatro o Telecinco liderando la oferta nocturna de esas respectivas noches y, posteriormente, un segundo pase en Factoría de Ficción, Energy o Divinity que han proporcionado datos extraordinarios a estos temáticos”.