_
_
_
_

La Antígona de Elena Asins

La artista retoma la tragedia de Sófocles para reflexionar sobre la intransigencia y la inflexibilidad

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Elena Asins, en 2012.
Elena Asins, en 2012. Javier Hernández

El mito de Antígona representa como ningún otro el enfrentamiento entre hombres y mujeres, las diferencias entre la sociedad y el individuo y los conflictos entre el pueblo y el Estado. Elena Asins (Madrid, 1940), retoma la tragedia de Sófocles para reflexionar sobre la intransigencia y la inflexibilidad. Su última exposición, en la galería Juana de Aizpuru (Barquillo, 44) es un llamamiento al diálogo y al respeto.

Asins ha vaciado el espacio de la galería para instalar en el centro el nombre de su heroína en caracteres griegos: Ἀντιγόνη. Esculpidas en gran formato y negro absoluto, las letras se funden produciendo una desasosegante sensación de duelo. Desde detrás de unas cortinas también negras, traspasa a todo volumen una música repetitiva que multiplica la inquietud.

Elena Asins ha querido rescatar la esencia de una tragedia que sigue afectando a tanto a nuestra vida cotidiana como a la económica, social y política. La artista considera que el mito clásico es un aviso de donde nos puede llevar la intransigencia dogmática del cumplimiento exhaustivo de las leyes y también a donde nos lleva la inflexibilidad de nuestras creencias más primarias. Respetar las leyes que respetan al hombre, es para esta artista, la única manera de superar distancias y retomar el diálogo para que la tragedia de Antígona no vuelva a reproducirse nunca más.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_