El virtuosismo de los mitos

No es una gala al uso y se trata de una excepcional reunión de primeros bailarines jóvenes de varias partes del mundo. Los Virtuosos es un complejo espectáculo en forma de recital coreografiado que recorrerá España desde mañana con el debut en el Teatro Quijano de Ciudad Real hasta principios del mes de junio con un total de 29 actuaciones a lo largo y ancho de la geografía peninsular, algo que recuerda las giras y gestas de antaño. En palabras de su guionista, la directora teatral y actriz cubana asentada en Madrid, Liuba Cid, la función “no solamente ilustra sobre el pasado sino que habla de lo presente que están todas esas danzas y esos estilos en el propio baile que se hace hoy”. La dirección artística del espectáculo ha sido encomendada a dos reputados maestros y exprimeros bailarines del Ballet Nacional de Cuba que actualmente ejercen su magisterio en España: Marta Salgado y Orlando Salgado, profundos conocedores del repertorio académico que han tenido la tarea de empastar con un criterio unitario a artistas provenientes de escuelas y estéticas muy diferentes. Salgado explica que “siendo el repertorio uno solo en todos los lugares donde se representa, en cada sitio y en cada escuela se entiende de una manera diferente. A veces se trata de cambios sutiles y casi imperceptibles para el espectador, pero en otros casos, hay cambios sensibles y significativos, esta es la grandeza del ballet”.

El espectáculo Los Virtuosos se centra en homenajear a Vaslav Nijinski, Anna Pavlova, Isadora Duncan, Martha Graham, Alicia Alonso, Maya Plisetskaia, Margot Fonteyn, Mijail Barishnikov, Vladimir Vassiliev y Pina Bausch. “No son todos los que están, pero los que se citan sin dudas son parte viva de la historia de la danza de nuestro tiempo. Algunos han muerto, otros viven, el caso es que a cualquier amante del baile escénico se le pregunta por estos nombres y alguna referencia tienen de ellos”, apunta Cid, que también se ha encargado de la dirección escénica.

La selección de los bailarines ha sido larga y laboriosa. Se trataba de no defraudar sobre un título tan ambicioso como comprometido: “Cuando decimos virtuosismo en ballet y en la danza en general hay que entenderlo de manera amplia como la excelencia, la búsqueda de esa excelencia a través de la interpretación y el rigor”, señala Salgado.

A la presentación de fragmentos clásicos que no podían faltar como los pas de deux canónicos de El lago de los cisnes (cisne blanco y cisne negro) o Don Quijote, piezas maestras del coreógrafo francés Marius Petipa y que son la piedra angular de ese virtuosismo que señalaba Salgado, se han escogido otros ballets que tiene cierto perfume mítico, como El espectro de la rosa de Mijail Fokin, que añeja la leyenda de su estreno por Nijinski en 1911 con los Ballets Russes de Serguei de Diaghilev, aquello de que en sus saltos daba la sensación o ilusión visual de quedar suspendido en el aire. Para representar el El espectro de la rosa lo han reconstruido según el original los bailarines Guzel Suleimanova y Dimitri Marasanov, primeros bailarines del Teatro de la Ópera de Bashkirian, jóvenes prácticamente desconocidos en Occidente pero que despuntan profesionalmente por su calidad.

En el caso del homenaje a Isadora Duncan, el trabajo se encomendó a la bailarina y coreógrafa italiana Lara Guidetti, que lidera la compañía Sanpapié y que en otras ocasiones ha sido vista por el público español. Guidetti optó por una recreación del estilo de la Duncan, de sus pies descalzos y de sus teorías inspiradas en la antigüedad clásica. La creadora explica: “Una reconstrucción literal de estos bailes no tenía sentido para mí. Acepté el encargo con la premisa de libertad, de poner reinterpretar una esencia virtuosa y muy original que es lo que le dio fama y trascendencia a la propia Isadora”. El trabajo se basó en los filmes y en las numerosas fotografías que se conservan de la mítica artista norteamericana que innovó el panorama de la danza y el ballet a principios del siglo XX: “He usado música sinfónica de Beethoven que Isadora usaba ya en sus conciertos, así como su indumentaria muy sintetizada, también he intentado captar la energía y el estilo de representación de la danza libre como expresión humanística”, recalca Guidetti a la vez que ilustra su discurso moviendo los brazos en arco sobre su cabeza.

Para el solo inspirado en Martha Graham, Lara Guidetti baila con su compañero Francesco Pacelli: “En Graham el dúo con el hombre es fundamental, el reto a lo masculino en contraposición a la entereza y tesón de la mujer. Esta era una de las grandes preocupaciones de Martha y eso he querido reflejar”, puntualiza Guidetti. En la velada se verán otras obras como La muerte del cisne (Fokin); Giselle (Alonso), Espartaco (en la reputada versión de Yuri grigorovich) y El corsario (Petipa).

En Los Virtuosos, además de un cuidado audiovisual ilustrativo de los mitos que se homenajean con fragmentos fílmicos de archivo poco conocidos estarán además Amaya Rodríguez y José Losada, nuevos primeros bailarines del Ballet Nacional de Cuba y Bianca Fota, Gigel Ungureanu, Maria Madalina Stoica y Ovidiu Iancu, estrellas del Ballet de la Ópera de Bucarest. Cubanos, rusos, italianos y rumanos que ofertarán un recorrido por lo mejor del patrimonio coréutico universal.