Sangre fría chilena
Blancas: A. Valdés (2.392). Negras: J. Egger (2.443).Defensa Caro-Kann (D42). Campeonato de Chile. Santiago, 23-2-2012.
A veces, la posición de un bando asusta mucho, aunque sea el otro quien está mejor. Veamos una lección magistral de serenidad en el reciente Campeonato de Chile (bit.ly/xp5DRV): 1 c4 c6 2 e4 d5 3 exd5 cxd5 4 cxd5 Cf6 5 Cc3 Cxd5 6 Cf3 e6 7 d4 Ae7 (la apertura casi garantiza que la partida será aguda; las blancas, con más espacio, tendrán libertad para atacar al rey; pero las negras contarán con recursos para defenderlo, además de la importante casilla d5 y contrajuego en el ala de dama) 8 Ad3 0–0 9 0–0 Cc6 10 Te1 Af6 11 a3 Db6 12 Ca4 Dc7 13 Te4?! b6 (con la torre un poco rara en e4, era un buen momento para 13 ..e5!) 14 Cc3 Cxc3 15 bxc3 Ab7 16 Af4 Dd8 17 Te3 Tc8 (todo según lo previsto: las negras con una posición armónica, presionan en c3, o en c4 y d4 si las blancas jugasen c4; mientras, las blancas provocan g6 para debilitar f6 y h6) 18 Ce5 g6 19 Cg4 Ag7 20 Ch6+ Rh8 21 Dg4 Ce7! (este caballo puede reforzar la defensa desde f5 o d5) 22 Th3 Txc3! (con mucha sangre fría, Egger juega a ganar; era un error 22 ..Cf5? 23 Axf5! exf5 24 Cxf5! gxf5 25 Dh5, ganando; en cuanto a 22 ..Cd5 23 Cxf7+ Txf7 24 Dxg6 Rg8 25 Txh7 Rf8, daría una posición muy confusa) 23 Dh4 (diagrama) (las blancas amenazan Cxf7+ y mate en h7; sólo hay una jugada que permite parar el alud y ganar con negras) 23 ..Dd5! 24 Rf1 (todo es ya inútil; tras 24 Cxf7+ Rg8 25 Dxh7+ Rxf7, las blancas no tendrían nada) 24 ..Txd3! 25 Txd3 Dxg2+ 26 Re2 Aa6 27 Ad6 Axd3+ 28 Rxd3 Df3+ 29 Rd2 Tc8! 30 Axe7 Axh6+ 31 Dxh6 Dxf2+ 32 Rd1 Dxd4+, y Valdés se rindió. Correspondencia: ajedrez@elpais.es
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.