Ben Gazzara, uno de los primeros actores 'indies' de Hollywood

La muerte de Ben Gazzara, 81 años, deja a Hollywood sin uno de sus primeros actores independientes, intérprete transgresor que saltó a la fama antes incluso de que la industria acuñara el término indie. Conocido tanto en el cine como en el teatro y la televisión, fue su trabajo junto a ese otro rebelde llamado John Cassavetes el que dejó más huella, especialmente su papel como un esposo frustrado en la película Husbands.

Gazzara ha fallecido este viernes en Manhattan víctima de un cáncer en el páncreas, según ha confirmado su abogado Jay Julien. Hijo de inmigrantes italianos que tan solo hablaban su lengua materna en casa, Gazzara pudo haber sido un Marlon Brando, alumno del método de Lee Strasberg como el actor de actores. De hecho, su salto a la fama lo obtuvo con uno de los grandes papeles dramáticos de todos los tiempos, en la obra de Tenesse Williams La gata sobre el tejado de cinc. El intérprete participó de su debut original en Broadway bajo la dirección de Elia Kazan. Sin embargo, como el propio Gazzara comentó en diferentes ocasiones a la prensa, siempre fue mucho más relajado en su carrera, acomodándose al mundo del teatro y dejando pasar numerosas oportunidades en el cine de las que luego se arrepintió. Aún así, Gazzara se ganó pronto el respeto de la industria gracias a películas como Anatomía de un asesinato, bajo la dirección de Otto Preminger, y especialmente su trabajo con Cassavetes no sólo en Husbands sino en otras cintas como Opening Night.

Se acomodó al mundo del teatro y dejó pasar  oportunidades en el cine

Hubo un Gazzara para todas las generaciones, con una carrera tan extensa como ecléctica, como demostró años más tarde su paso por la comedia fallida de Peter Bogdanovich They all Laughed o, más recientemente, en su trabajo junto a los hermanos Coen en El gran Lebowski. Gazzara también trabajó en la televisión y formó parte del cine italiano cuando, tras comprarse una villa en Umbría, aseguró que decidió trabajar donde la gente le quería. Para trabajar en Italia le vino bien el idioma aprendido de niño.

Casado en tres ocasiones y con dos hijas, una de ellas de su segundo matrimonio y la segunda adoptada tras casarse con su tercera esposa, Gazzara también tuvo un affaire con Audrey Hepburn, la musa de Hollywood con quien trabajó en Bloodline y They All Laughed, uno de los últimos papeles cinematográficos de la actriz. Víctima de un cáncer en la boca que superó y que no le impidió a este candidato al Tony teatral en tres ocasiones volver a Broadway en 2006, Gazzara fue siempre honesto al confesar su continua lucha contra la depresión, aunque irónicamente uno de sus últimos papeles en cine fuera en la película Hapiness de Tom Solondz.