Primera noche de altibajos protagonizada por el eufórico arranque de Underworld

Mítico dúo del pop británico de los 90, Underworld ofreció lo que se esperaba de ellos en el arranque de la primera noche del Sónar Galicia: baile al ritmo de grandes juegos audiovisuales, luces de colores y clásicos de lo que fue la antesala de la electrónica. El contorsionista Karl Hyde supo llevar el compás de un público de todas las edades y entregado, pese a algún momento de decaimiento en un concierto que era uno de los más esperados del cártel de esta segunda edición gallega del afamado festival de música avanzada.

Recortado a sólo dos noches y con menos gente de la esperada -apenas unas 4.000 en la primera sesión que acabó pasadas las seis de esta madrugada-, no faltó no obstante ni energía ni ganas de rendirse a la cadencia más endiablada de la electrónica. Fue una noche de bailoteo con una sucesión de DJ de todos los estilos y gustos y altibajos como los que marcaron el espectáculo de Mr Smith y Mr Hyde o el de sus compatriotas Magnetic Man, otro de los platos fuertes de la noche de ayer en A Coruña.

A Underworld les tocó abrirla y quizás por esa demasiado tempranera actuación la respuesta del público fue desigual. Pero dieron espectáculo con fuertes reminiscencias del pasado reciente, como las bocanadas de humo discotequero que salpicaron su actuación de hora y media en la que mezclaron viejos temas con su nuevo trabajo 'Barking'. Y cuando decayó el ambiente, el dúo supo darle un giro con su pegadizo 'Born Slippy' que, en una versión alargada, supuso un final apoteósico. Dos horas más tarde, en el mismo escenario Magnetic Man, especialista en públicos masivos, no tuvo que trabajárselo mucho para animar la pista con sitio de sobra para bailar.

La noche terminó entre las percusiones techno de Shackleton, los angoleños ritmos verbeneros de Buraka Som Sistema y el 'frikismo' del DJ que se hace llamar The Gaslamp Killer. Arrolladora se espera esta noche la actuación de la inglesa de origen hindú M.I.A, que encabeza el cártel junto con los británicos Four Tet, los australianos Cut Copy o, a la misma hora, el popular Richie Hawtin.