Diego El Cigala deja plantado al público en Santo Domingo

Terminó de tocar Dos gardenias, y se retiró el escenario. El cantaor español Diego El Cigala abandonó el escenario antes de lo previsto en su última actuación en Santo Domingo y dejó plantado al público, que no paraba de beber, comer y...hasta besarse, ha informado hoy la prensa dominicana. Según hoy.com.do , Si te contara, Bravo, Compromiso, Se me olvidó que te olvidé, Historia de un amor, Corazón Loco, Veinte años, Dos cruces y Bien pagá fueron parte del repertorio.

En su anterior presentación en ese mismo escenario hace tres años el artista solicitó que mientras él estuviera actuando no se sirviera bebida. "Me gusta que la gente me escuche. No soy un artista de cabaret, soy de teatro y del arte. Hubiera podido hacer tres horas de concierto, pero viendo a la gente hablando pues que cante 'Rita la Cabaretera'. Cuando veo a la gente conversar, mejor me bajo", son algunas de las declararaciones de las que se hacen eco los medios y la agencia EFE.

"Que no me estaban atendiendo. El público estaba comiendo, bebiendo, conversando, besándose. No estaban en Diego", declaró el artista a Diario Libre tras interrumpir inesperadamente su actuación. El Cigala, que ofrecía su concierto titulado Dos lágrimas en un hotel de la capital dominicana la noche del martes, decidió salir del escenario y no regresar, lo que causó el malestar de muchos espectadores que habían pagado hasta 5.000 pesos (109 euros) para ver de cerca al cantante flamenco.

"Yo necesito que el público esté en mi, porque vengo a darle un show que siempre es diferente. Los mismos músicos me lo dijeron: 'A¿qué hacemos aquí?'", señaló. La actuación duró poco más de una hora, aunque pudo haber durado tres, según dijo el artista. Pero "cuando veo a la gente conversar, mejor me bajo", agregó. Los espectadores se dieron cuenta de que el espectáculo había finalizado cuando se encendieron las luces de la sala y los técnicos comenzaron a desmontar los equipos. Sólo entonces se escucharon aplausos, aunque también silbidos y abucheos.