Fallece a los 74 años el cineasta Jacques Deray, maestro del cine negro francés

El cineasta Jacques Deray, maestro del cine negro francés, falleció anoche a los 74 años en su residencia de Boulogne-Billancourt, a las afueras de París, a consecuencia de una larga enfermedad, según ha anunciado hoy su familia en un comunicado. Los críticos llegaron a apodarlo el Hitchcock del cine francés.

El cineasta, cuyo verdadero nombre era Jacques Desrayaud, nació en 1929 en Lyon en el seno de una familia acomodada, e inició su carrera como actor. Sin embargo, a los 30 años se dio cuenta de que no tenía vocación y decidió colocarse detrás de la cámara. A partir de 1952, comenzó a trabajar como asistente de los realizadores Jean Boyer, Henri Verneuil, Georges Rouquier, Guilles Grangier, Jules Dassin o Luis Buñuel.

Su primer filme, Le Gigoló, una comedia sentimental con Alida Valli y Jean-Claude Brialy, lo realizó en 1960, luego le siguieron dos cintas policiacas, Rififi en Tokio (1961) y Symphonie pour un massacre (1963). A continuación sufrió varios fracasos comerciales hasta que levantó cabeza con La Piscina (1968), con Alain Delon, Maurice Ronet, Romy Scheider y Jane Birkin.

Al año siguiente rodó Borsalino, que recrea la historia de los mafiosos marselleses de la década de los años 30 Carbone y Spirito, con el consagrado dúo Delon-Belmondo.

Además de las dos películas ya citadas, Delay dio el protagonismo a Delon en Doucement les basses (1970), Borsalino and Co. (1974), Flic Store (1975), Le gang" (1976), Trois hommes a abattre (1980), Un crime (1993) y "L'ours en peluche (1994).

A Belmondo le reservó Le marginal (1983) y Le solitaire (1987), mientras que Michel Serrault y Charlotte Rampling protagonizaron la mítica On ne meurt que deux fois (1985).