España da el pistoletazo de salida a la movilidad aérea urbana

La empresa pública Ineco presenta este viernes el Libro Blanco de los Vertipuertos, un documento que pone las bases para impulsar la creación en España de este tipo de instalaciones para drones eléctricos de despegue vertical. “Este libro, elaborado junto con fabricantes, constructoras y administraciones públicas, es el punto de partida para la movilidad aérea innovadora en España”, explica Ernesto de la Fuente, experto en desarrollo aeronáutico de Ineco. Aunque el sector requiere todavía una regulación específica, se espera que en el futuro próximo estos drones —que ya se prueban en algunas urbes españolas— permitan mover mercancías y viajeros de forma limpia y transformen la movilidad urbana.

Ya hay algunos vertipuertos en España, aunque todavía funcionan en modo experimental para pruebas piloto. Pueden ser de varias formas, desde un espacio de dos o tres metros vallado en el suelo para drones de carga ligera, a otro de unos 20 metros para transportar personas. En el futuro, se estudiará instalarlos cerca de instalaciones como nodos de transporte o de distribución logística.

Mientras llegan esos avances, varias empresas hacen ya pruebas de transporte con drones en Jaén, Zaragoza, Lugo o A Coruña, entre otros enclaves. Además, urbes como Madrid y Zaragoza estudian una regulación municipal específica para estos aparatos e instalaciones. De hecho, Ineco lidera un grupo de estudio, el Clúster SIAM, para centralizar las distintas experiencias y trabajar a partir del documento.

Isabel Buatas, presidenta del Clúster SIAM, explica: “El libro recoge toda la información de las reuniones celebradas con la industria y las administraciones públicas, con el objetivo principal de establecer una hoja de ruta clara y consensuada para el despliegue de estas infraestructuras. Existe un gran potencial de mercado y España se posiciona como líder en este ámbito de infraestructuras. Nos encontramos ante la nueva era de la movilidad, que transformará las ciudades tal y como las conocemos hoy en día”. Coincide Sergio Vázquez, presidente de Ineco: “Estamos ante un horizonte incierto, propio de los inicios de las grandes transformaciones. Cuando explosione el sector, SIAM habrá logrado posicionar a España y Europa en primera línea de salida”.

Las infraestructuras para aterrizar y despegar en vertical son claves para facilitar una nueva movilidad. “Las aeronaves con capacidad de operación vertical marcan el inicio de una nueva era en la movilidad aérea, redefiniendo cómo nos desplazamos en entornos urbanos y remotos. Con tecnologías como propulsión eléctrica, hidrógeno y sistemas híbridos, ofrecen alternativas sostenibles que reducen emisiones, ruido y congestión”, señala el trabajo, de más de 250 páginas, que enumera la gran variedad de drones que existen y los que se prevén.

¿Qué pueden aportar los vertipuertos a la sostenibilidad? “Son el lugar desde el que despegan y aterrizan los drones eVtol, que son eléctricos, así que no consumen combustibles fósiles ni contaminan. Es una movilidad limpia”, responde De la Fuente. “También ayudan a reducir los niveles de ruido, porque incluso los vehículos más grandes emiten la mitad de decibelios que los helicópteros”, añade. El experto destaca el papel de la ingeniería para avanzar en este sentido.

Pruebas en hospitales

En su opinión, los futuros vertipuertos podrán acoger naves grandes capaces de transportar personas con drones más pequeños capaces de mover mercancías. “Los primeros pasos los vamos a ver en los hospitales y centros sanitarios: cuando tengan que mandarse algo urgente como un tejido, un órgano, sangre... podrán enviarlo en un dron, que es la manera más rápida. Y si necesitan trasladar a un paciente, será con un eVtol, que es más barato, ensucia menos y hace menos ruido que un helicóptero o una ambulancia. No creo que el mundo se llene de aparatos volando, pero en aquellos sitios en los que tengan sentido sí veremos esas aeronaves”, prosigue.

Uno de los principales retos para esta transformación es el desarrollo de una normativa específica europea. Por ahora, existe legislación para los drones más sencillos —teledirigidos y con poco radio de acción—, pero la Comisión Europea está elaborando un reglamento para los nuevos dispositivos, que pueden volar en modo automático con carga, o bien con piloto y pasajeros. La idea es que esa futura norma defina cómo deba ser la construcción de estos aparatos, cómo deberán operar y qué formación necesitarán los pilotos. Sin embargo, el libro se muestra optimista: “La regulación específica para vertipuertos avanzará rápidamente, habilitando operaciones iniciales y asegurando que las pruebas piloto sirvan como modelos prácticos”.

El documento también señala que el desarrollo de estas infraestructuras tiene que ir unido a la planificación urbanística: “El reto de adaptar las ciudades para acoger vertipuertos va más allá de la mera construcción de una pista o un edificio terminal. Es necesario repensar cómo las ciudades pueden integrar estas infraestructuras en sus dinámicas cotidianas, asegurando que estén en sintonía con las necesidades de movilidad intermodal, sostenibilidad y bienestar urbano”. Por eso, “el diseño de las rutas urbanas deberá realizarse buscando minimizar el riesgo en tierra, evitando sobrevolar aglomeraciones de personas y dando prioridad a zonas con menor densidad de edificaciones”.