Colau logra el apoyo de Junts per Catalunya a las cuentas de Barcelona

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pasará de no haber aprobado nunca los presupuestos del Ayuntamiento de la capital catalana por la vía ordinaria, a aprobar los primeros con holgada mayoría. Tras anunciar el viernes pasado un acuerdo con ERC, Colau ha logrado que Junts per Catalunya apoye también los presupuestos municipales. El amplio "acuerdo político" ha sido presentado este lunes en la solemnidad del Saló de Cent del Consistorio con representación de todos los firmantes: la alcaldesa —que ha hablado de una "nueva etapa de diálogo y desbloqueo"—, el primer teniente de alcalde Jaume Collboni (PSC), y los jefes de filas de ERC, Ernest Maragall; y Junts per Catalunya, Elsa Artadi.

Con este pacto a tres bandas, el ejecutivo municipal de coalición entre comunes y el PSC conseguirá llegar sobrado de apoyos al pleno del próximo día 31: tendrá los 18 votos del gobierno, más 10 de los republicanos y cinco de los neoconvergentes. En total, 33 de los 41 concejales que tiene el pleno, una situación "histórica", como ha definido la alcaldesa. En el mandato pasado, las cuentas salieron adelante, por orden cronológico, con una ampliación de crédito (2016), dos cuestiones de confianza (2017 y 2018) y una prórroga (2019).

Tras escenificar el acuerdo, la alcaldesa ha puesto en valor la amplia mayoría conseguida y ha afirmado: “Es más que un acuerdo de presupuestos, es una nueva etapa de política útil, diálogo y acuerdos que la ciudadanía nos pide para que las instituciones funcionen a pleno rendimiento”. Una "nueva etapa, tras años de bloqueo en las instituciones que han impactado los servicios públicos", ha dicho, "con unos presupuestos que no son de ningún partido, sino de Barcelona". Y ha señalado que el diálogo se abre también paso en el Parlament, donde ha habido acuerdo entre los comunes y el Gobierno de Junts per Catalunya y ERC sobre las cuentas.

El pasado viernes, cuando el gobierno de la ciudad presentó el acuerdo con ERC, Colau y Maragall detallaron que confiaban en cerrar el acuerdo en los próximos días para su aprobación en el pleno municipal de este enero. Durante las negociaciones, ERC arrancó el compromiso de que las inversiones se incrementen en 100 millones de euros sobre lo previsto, lo que comportará que por primera vez las cuentas superen los 3.000 millones de euros.

Este lunes, Maragall ha puesto en valor el acuerdo y el esfuerzo que ha comportado por todas las partes: "No es un cambio de cromos, es fruto de tres meses de trabajo", ha celebrado. Por su parte, el socialista y socio de Colau, Jaume Collboni, ha aplaudido un acuerdo que se ha logrado "cuando el objetivo era hablar de Barcelona y su futuro".

En el caso de Junts per Catalunya, Elsa Artadi ha reivindicado la actitud de su grupo: "Hemos trabajado para no quedarnos en la crítica, siempre que la puerta del Gobierno esté abierta nos tendrán para mejorar". Si ERC impuso inversiones extra por 100 millones, las principales aportaciones de Junts a las cuentas son 30 millones de euros para renaturalizar espacios públicos y crear cubiertas verdes en edificios, inversiones en distritos (para rehabilitar torre Garcini, una supermanzana en la Bonanova, la ronda de Sant Antoni y la compra de la fábrica de Plom) y el compromiso del ejecutivo de Colau de evaluar las políticas públicas.

El acuerdo ha sido interpretado de forma parecida por los grupos municipales de Ciutadans y PP. La presidenta del grupo de Cs, Luz Guilarte, ha alertado de que con este pacto "el Ayuntamiento de Barcelona pivotará sobre los intereses de los separatistas". "Han primado más los intereses del independentismo que los de la ciudadanía", ha interpretado y ha añadido que el pacto presupuestario en Barcelona es por "un intercambio de favores en un lote de negociación con otras Administraciones". El líder del PP en el Ayuntamiento, Josep Bou, ha valorado que "el acuerdo entre Colau y los separatistas es por conveniencia y no resolverá los problemas de Barcelona".  "Es el último paso para confirmar que el tripartito de izquierdas gobierna de nuevo" la ciudad, ha dicho. "Los socialistas se vuelven a tragar el sapo de los separatistas, como en la investidura de Pedro Sánchez", ha añadido, al tiempo que ha considerado una "extraña ecuación" la entrada de JxCat en el pacto.