Tarragona activa camiones cisterna por la tubería averiada

El reventón de la tubería central de distribución de agua en Tarragona comportó ayer la escasez de agua potable en algunos municipios, sobre todo en la comarca del Baix Penedès, donde se hizo necesario recurrir a camiones cisterna para abastecer a los vecinos.

Apenas 24 horas después del incidente, Calafell y Bellvei agotaron los depósitos subsidiarios y tuvieron que buscar soluciones de emergencia ante la prolongación de la avería. Mientras, la empresa distribuidora, Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT), explicó que los técnicos tratan de aligerar los trabajos para remendar la incidencia lo más pronto posible. La última previsión, facilitada por el propio Consorcio, apuntaba a que el corte de agua se podría dar por solucionado durante la madrugada del domingo y que, a partir de entonces, el servicio se restablecería paulatinamente.

El Consorcio de Aguas presta el suministro de agua potable a un total de 63 municipios y 26 empresas de las comarcas de Tarragona, cubre toda la franja costera, desde el Baix Penedès hasta el Delta del Ebro. En el contrato de servicio consta que cada cliente debe garantizarse una fuente subsidiaria de agua, para paliar posibles incidencias. Pero los depósitos auxiliares tienen una capacidad limitada y, el paso de las horas sin poder recurrir a la tubería central, acucia la escasez de agua. En Calafell y Segur de Calafell fue necesario instalar tres camiones cisterna y en Bellvei, otros dos. “Pese a ser una incidencia ajena a nuestra compañía, estamos poniendo todos los equipos necesarios para garantizar el suministro de agua a los municipios afectados”, informó la empresa Sorea, concesionaria del servicio de aguas en varias de las localidades perjudicadas por el corte. 

El Consorcio de Aguas espera poder restablecer el suministro durante la madrugada. La distribuidora admitió que, aunque el corte de la tubería no implica forzosamente que se haya dejado de manera automática a todas las poblaciones afectadas sin agua —cada municipio tiene sus propias reservas—, hay ayuntamientos, como Sant Carles de la Ràpita, que son más dependientes.

El servicio está interrumpido desde la madrugada del viernes, cuando reventó un tramo de la cañería principal que sale de la Estación de Tratamiento de Agua Potable de L’Ampolla. La tubería se partió junto a la AP7 y, pese a que no afectó a la vía rápida, causó una riada que arrastró a una veintena de coches por las calles de l'Ampolla. El incidente obligó entonces a cortar el suministro a los depósitos de cabecera de 63 pueblos de las Terres de l’Ebre y del Camp de Tarragona y a los de 26 industrias de la zona.